El sencillo ejercicio de la psicóloga García Moreno para aceptar tu imagen este verano

A medida que avanza el año y se aproximan los meses de verano, son muchas las personas que empiezan a cuidar su cuerpo. Y es que, ¿quién no quiere lucir una buena silueta durante esa temporada? Además, todos hemos pensado alguna vez que no nos gusta nuestro cuerpo, ya sea porque nos vemos demasiado delgados o, por el contrario, nos encontramos con más peso.

Esta situación se da más fácilmente en la adolescencia y madurez, afectando en mayor medida a las mujeres. Natalia, por ejemplo, ha sido madre hace tan solo unos meses y ha reconocido en 'La Linterna' que se ha comprado bañadores porque no le gusta el cuerpo que se le ha quedado. Y, aunque está intentando hacer deporte, le resulta difícil.

¿Cómo influye este problema en nosotros?

Otro caso es el de Mercedes, una mujer que acaba de empezar con la menopausia y ha dejado de fumar, por lo que ha cogido peso. "No tengo fuerza de voluntad para dejar de comer una hamburgesa", contaba. Es por ello por lo que ha preferido meterse en una dieta controlada y vigilada.

Ahora bien, ¿cuáles son los factores que influyen en nuestra percepción? Aurora García Moreno, nuestra neuropsicóloga, ha explicado que "es algo muy subjetivo". En ella intervienen muchos factores como la forma de pensar, la motivación, la educación e, incluso, la cultura. El entorno también influye, además de los comentarios de las redes sociales y aquellos que hemos recibido desde la infancia.

Pasa como con todo, que tiene efectos negativos, veasé la "ansiedad". Y todo se refleja a la hora de vestir, el momento en el que "no queremos ponernos alguna que otra prenda" y en ámbitos como el de la alimentación y psicológicos, "delimitando el desempeño a su máxima potencia y llegando a consumir sustancias nocivas", aclaraba.

¿Podemos aprender a aceptar nuestro cuerpo?

Queda claro que la imagen corporal y la autoestima "se necesitan la una a la otra". Es por ello por lo que es fundamental aceptarnos. De este modo, mejoraremos nuestro propio bienestar y la confianza, pues "si te sientes bien, la autoestima se fortalece", confirmaba Aurora García Moreno.

Es aquí donde, en caso de hablar de problemas así en niños, el papel de los padres llega a ser fundamental. Que un menor escuche a un referente hablar de estos temas en casa, hace que aprenda mejor a sobrellevar aquellos comentarios que puedan llegar a sufrir en su entorno. Aun así, deben evitarse las comparaciones.

Con todo esto, parece "fundamental aprender a identificar y cambiar lo negativo por patrones más positivos y funcionales". Para ello hay que trabajar la autoestima, aprender a aceptarse a uno mismo y entrenar la atención. Así conseguiremos cambiar el "foco negativo" y generar una percepción que nos genere un bienestar mucho más agradable.