Ángel Correas: "Puede que la foto de Colón no sea la que espera el Gobierno de Sánchez"

Es un domingo en el que la atención sigue puesta en Tenerife escenario del caso de las dos niñas, Anna y Olivia asesinadas por su padre, Tomás Gimeno. En las últimas horas la investigación del crimen ha ido avanzando. Se ha levantado el secreto de sumario que reconstruye prácticamente minuto a minuto lo que pasó en la noche del 27 de abril cuando desaparecieron las pequeñas. Pensar en la premeditación con la que actuó el sospechoso afianza la idea de que fue una auténtica canallada.

Pensar en la premeditación con la que actuó el sospechoso afianza la idea de que fue una auténtica canallada

La juez considera que Tomás Gimeno mató a sus hijas en su casa y envolvió los cuerpos en toallas, los metió en bolsas de basura y de ahí en petates deportivos. Después se marchó mar adentro y hundió los cuerpos con el ancla de su lancha para hacer imposible su localización. Textualmente, la magistrada considera que lo hizo para “provocar un dolor inhumano a su expareja”.

MANIFESTACIÓN DE COLÓN

Por lo demás, la jornada viene teñida de intensidad política. A las 12 del mediodía el Gobierno Pedro Sánchez se enfrentará a la primera convocatoria ciudadana contra la concesión de los indultos a los presos independentistas. La de la Plaza de Colón en Madrid.

Durante más de dos años el PSOE ha exprimido políticamente la fotografía de la Plaza de Colón de 2019 en la que posaban los líderes del PP, Ciudadanos y VOX. Una foto que se ha repetido como un mantra en los debates, en las ruedas de prensa, en los mítines de las diferentes convocatorias electorales que se han sucedido desde entonces. La foto de Colón... La foto de Colón... En aquella ocasión, febrero de 2019, fueron miles de personas las que se manifestaron pero la foto quedó recortada y reducida al escenario donde se movían Casado, Abascal y Rivera.

Habrá una nueva foto de Colón y puede que no sea la que espera el Gobierno de Sánchez

Dos años y medio después habrá una nueva foto de Colón y puede que no sea la que espera el Gobierno de Sánchez. Esta vez no será tan fácil recortar el marco de la foto para reducirla a una escenario político sin más.

Si acudirán los líderes de los partidos políticos de PP, Vox y Ciudadanos pero no serán los líderes de la convocatoria. Irán juntos pero no revueltos en una convocatoria que ha partido de la plataforma ciudadana Unión 78.

Desde hace semanas los miembros del Gobierno han venido minimizando la convocatoria de Colón. Perfil bajo que se dice técnicamente, esperando a que el titular se centre en si el PP se atreve a hacerse la foto o no con VOX, por ejemplo.

Pero el Gobierno es consciente de que un buen número de españoles no comparte la estrategia de los indultos y eso es muy difícil de ignorar. La imagen de hoy puede evidenciar ese malestar y puede ser que aludir a la Foto de Colón adquiera a partir de hoy otros matices diferentes de los que, políticamente, tenía hasta ahora.

Para Sánchez, probablemente, no hay un plan B

La dificultad para identificar a día de hoy la manifestación con una sigla concreta saca al Gobierno de su discurso habitual. La vicepresidenta Carmen Calvo insiste hoy en La Vanguardia en la legalidad de los indultos y señala que no hay alternativa. No hay opción B.

Y no hay opción B, porque una opción B supondría aplicar por ejemplo lo que dice el Supremo, esperar a que los condenados muestren al menos arrepentimiento y cumplan un mínimo de su pena. Pero eso supondrá que Sánchez se quedaría sin apoyos para permanecer en Moncloa. Así que efectivamente, para Sánchez, probablemente, no hay un plan B.