El suceso de 1999
El caso Wanninkhof: los hechos que marcaron un antes y un después en la historia del crimen español
En 2021 se cumplirán veintidós años del asesinato de Rocío Wanninkhof. Recordamos su historia en 'La Noche de Adolfo Arjona'
Málaga - Publicado el - Actualizado
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Cualquier español que tenga más de treinta y cinco años recuerda el caso Wanninkhof. Rocío era una joven de 19 años con rostro aniñado. Delgada. Rubia. Sonriente. Sin quererlo, se convirtió en protagonista de una terrible historia.
INICIO DEL CASO WANNINKHOF
Es uno de los casos más mediáticos de nuestro país. 'La Noche de Adolfo Arjona' se sitúa en el 9 de octubre de 1999, en Mijas, Málaga. Rocío había pasado la tarde en casa de su novio. Sobre las nueve y media de la noche decide volver a la suya para cenar algo y arreglarse. Habían quedado más tarde para acudir a la feria de Fuengirola y ver a los amigos. Sin embargo, nunca llegaría a su destino.
Por la mañana, ante la extrañeza de su madre, Alicia Hornos, de que su hija no hubiera llegado de la feria decide enviar a su otra hija a la vivienda del novio de Rocío. “A lo mejor había pasado la noche con él”, diría posteriormente a los investigadores.
Pero no había sido así. Rocío Wanninkhof no estaba con su pareja. Tampoco con las amigas. Ante la preocupación, Alicia Hornos decide salir a buscarla. Cerca de casa encuentra una enorme mancha de sangre que le hace pensar que allí habían matado a un animal. La desesperación, o el instinto, le hacen mirar por el terraplén próximo y es cuando encuentra las zapatillas deportivas que llevaba su hija. Comienza aquí el denominado caso Wanninkhof.
LA DETENCIÓN DE DOLORES VÁZQUEZ
Tres semanas después de peinar la zona, aparece el cuerpo desnudo de Rocío Wanninkhof en el término municipal de Marbella. Presentaba un avanzado estado de descomposición. Diez meses de investigación dieron como resultado la detención de Dolores Vázquez, la ex pareja de Alicia Hornos.
El Ministerio Fiscal estaba convencido de que Dolores Vázquez se encontró a la joven el 9 de octubre y discutieron, probablemente porque a Rocío no le gustaba la actitud paternalista que seguía manteniendo con ella Dolores. Según el fiscal, con un punzón o estilete mató a la joven y escondió su cuerpo en unos matorrales para posteriormente trasladarlo a un paraje de Marbella.
Aquel relato del Ministerio Fiscal fue suficiente para que un jurado popular considerara culpable a Dolores Vázquez. En septiembre de 2001 era condenada a 15 años de cárcel.
“YO NO HE MATADO A ROCÍO”
Cinco meses después de que Dolores Vázquez ingresara en prisión, el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía ordenaba repetir el juicio por falta de motivación en el veredicto del jurado y la sentencia. Era febrero de 2002. Mientras llegaba la fecha del nuevo juicio, la mujer más odiada de España en aquel momento, salía de prisión bajo fianza de 30.000 euros. Convocaba a la prensa en su propia casa para insistir, una vez más, en que ella era inocente. "Estoy harta, basta ya. Yo no he matado a Rocío. Yo no he tenido nada que ver. Me han condenado. Yo no lo he hecho. Estoy harta de repetirlo. Estoy que no puedo más. No puedo más", aseguró Vázquez al medio centenar de periodistas, cámaras y fotógrafos que se dieron cita en el jardín de su casa.
GIRO INESPERADO DEL CASO
La verdad sobre el caso Wanninkhof se conoció a finales de 2003 cuando el británico Tony Alexander King se confiesa autor de varias agresiones sexuales en Málaga, de la muerte de Sonia Carbantes en Coín y del asesinato de Rocío Wanninkhof en Mijas.
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