La perturbadora noche que Javier Sierra vivió en la Gran Pirámide de Egipto: "Una simulación de mi muerte"
El prestigioso escritor ha desvelado en 'La Noche de Adolfo Arjona' cómo fue la noche en la que se adentró en la Gran Pirámide de Egipto y qué aterradores momentos vivió
Madrid - Publicado el
3 min lectura
Hablar de Javier Sierra es hablar de misterio y descubrir lo que estos esconden, y prueba de ello la encontramos en las palabras que ha expresado con Adolfo Arjona en La Noche. El escritor galardonado con el Premio Planeta ha recordado cómo fue la perturbadora noche que pasó en el interior de la Gran Pirámide de Egipto y cómo lo ha sabido plasmar en su libro ‘La Pirámide Inmortal’, que ahora también tiene una versión en formato cómic.
Por qué Napoleón Bonaparte tenía tanto interés en Egipto
Javier Sierra ha recordado cómo fue, según cuenta la historia, la expedición de Napoleón Bonaparte en Egipto. Sierra siguió sus pasos al adentrarse en la Gran Pirámide, pero antes de contarnos su experiencia, ha explicado por qué, el que más tarde fuera emperador de Francia, tenía tanto interés por la civilización y cultura egipcia: “Napoleón llevó consigo 167 sabios para estudiar las antigüedades de Egipto. Se tenía la idea de que el origen de la civilización no estaba en Grecia y en Roma, sino en Egipto. Napoleón estaba muy interesado y quiso pernoctar en la Gran Pirámide, como otros grandes emperadores romanos”.
“Napoleón pasó esa noche acompañado y escoltado y estuvo en su interior. Cuando salió estaba descompuesto, y dijo que si contara lo que vivió, nadie llegaría a creerle. Nunca dio detalles. Algo le ocurrió y le afectó en su fuero más íntimo”, ha precisado Javier Sierra.
El escritor considera que “la noche en la Pirámide de Napoleón fue una noche de iniciación. Fue al monumento que representaba la muerte y cuando salió fue un nuevo Napoleón. Tres días después dejó Egipto, llegó a Francia y en dos meses dio el golpe de Estado que más tarde lo convirtió en emperador. Eso tuvo mucho que ver con lo que vivió en la Pirámide”.
Los "perturbadores" momentos de Javier Sierra dentro de la Gran Pirámide
Javier Sierra ha reconocido a Adolfo Arjona que en aquel momento él era un joven periodista. Era el año 1997, y ante la falta de fuentes que consultar, “la historia no me dejó otro remedio que imitar a Napoleón y pasar una noche en el interior de la Gran Pirámide para ver si entendía lo que le había ocurrido. Me condujeron hasta aquella sala, me dejaron solo con una botella de agua, un paquete de galletas y una linterna. En aquellas horas ocurrió de todo”.
“Apagaron la luz del sistema eléctrico que tiene la Gran Pirámide. Cerraron el monumento hasta el día siguiente y yo me quedé dentro. En esas horas, y en aquella habitación tan pequeña donde hasta la respiración crea eco, tuve que aguantar todos mis miedos”, ha recordado.
La sensación que provocó que Javier Sierra lo pasara “realmente mal”
El Premio Planeta ha reconocido que al cabo de unas horas “no sabía ni dónde terminaba” su cuerpo y dónde empezaba la oscuridad. “Me sentía como un azucarillo disolviéndose en una taza de café negro. Pero fue ahí cuando comprendí que quizá estaba viviendo una simulación de la muerte. Me asusté y me tumbé en un sarcófago y fue ahí donde tuve la sensación de que mi cuerpo llenaba por completo aquel sarcófago. ¡Adolfo, eso es imposible! No mido dos metros”, ha expresado Sierra.
Javier Sierra reconoce que cuando salió de la Gran Pirámide por primera y única vez en su vida, tuvo la sensación de estar vivo: “Fue una experiencia muy perturbadora pero me sirvió de gran inspiración para la novela y este nuevo cómic”.
También te puede interesar:
Desnudo y calcinado: las incógnitas que rodean la muerte de Francisco Quintana casi 17 años después
Las catastróficas consecuencias si el viento dejara de soplar en el planeta