¿Y si las bacterias de la nariz nos protegieran contra el virus de la gripe?
Un estudio ha revelado que las bacterias de nuestras cavidades nasales juegan un papel determinante a la hora de contraer la gripe.
Madrid - Publicado el - Actualizado
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Lo comentábamos la semana pasada con el director médico de COPE, Esteban Pérez Almeida: la tasa de gripe ya ha alcanzado rango de epidemia este invierno. Sin embargo, esto es una constante, año sí y año también. Así que no ha pillado desprevenido a nuestros servicios sanitarios. Sin embargo, lo que parece que sí ha cogido por sorpresa a más de uno es el supuesto origen de muchos de estos casos de gripe.
Un estudio de la Universidad de Michigan, publicado en la revista Plos One, ha revelado que las bacterias de nuestras cavidades nasales juegan un papel determinante a la hora de contraer la gripe. Y es que, según ellos, las bacterias de la nariz podrían ser el secreto que se esconde detrás de aquellas personas ‘superreristentes’ a los procesos gripales.
El doctor en Bioquímica, José Miguel Mulet contaba e La Noche de COPE que “estos investigadores han secuenciado genomas de bacterias para saber cuáles están en la población que les cuesta más contraer la gripe. Quedaría por comprobar su causa-efecto en profundidad, con variables concretas”.
“Aquí hay que matizar que, ahora mismo, estamos viviendo un boom de investigaciones sobre bacterias. Estamos teniendo muchos datos, pero hay que procesarlos y entenderlos”, añadía Mulet.
Asimismo, hay que tener en cuenta, otros factores, como la edad. “Esto es fundamental, y no se puede pasar por alto”. Concretaba el doctor.
Por otra parte, “entender la microbiota de la nariz necesitaría más estudios, con distintas poblaciones, y de distintos lugares para extraer conclusiones”, explicaba José Miguel Mulet.
Finalmente, ha querido remarcar que “lo que, probablemente, pase en nuestras cavidades nasales es que las bacterias compitan entre ellas para quedarse en la nariz”, y continuaba concluyendo que “no debemos relacionar directamente el frío con la gripe. Lo que ocurre realmente es que con el frío es más difícil que los virus se degraden y llegan, vía aérea, con más facilidad hasta nosotros”.