'Somos acogida': la ONG que fundó Emilia para acoger a jóvenes migrantes que dormían en la calle: "Que se sientan como en familia"

Emilia ayuda a quienes no tienen nada, como a los jóvenes migrantes, a los que ayuda desde hace seis años. En 2019, junto a su marido y vecinos del barrio madrileño de Hortaleza, creó la ONG 'Somos acogida'.

Todo comenzó cuando Emilia se dio cuenta de que estos chicos, cuando cumplían 18 años, se veían obligados a abandonar el centro de acogida público en el que estaban. Se quedaban en la calle, sin recursos y sin apoyos. Algunos sin saber ni siquiera castellano.

“Hay un parque enfrente de mi casa, yo tengo una perra y paseaba con ella y así fue como los encontré y percibí las mirada de odio de algunas personas de la sociedad civil. Me dolía tanto que no entendía por qué, si eran adolescentes normales”, ha comentado Emilia en 'La Tarde'.

El primer contacto de Emilia con estos jóvenes migrantes fue Mohammed, quien le mostró cómo era la vida de estos chicos al cumplir la mayoría de edad. Mohammed dormía en la calle. Emilia no daba crédito y le ofreció de manera temporal dormir en su casa, sin apenas conocerle.

Fue en ese momento cuando nace la asociación 'Somos acogida' con la participación del barrio de Hortaleza, cuyos vecinos ofrecían sus viviendas para acoger a estos migrantes de manera temporal. Uno de ellos fue derivado a la casa que Emilia tiene en la localidad toledana de la Puebla de Almoradiel.

Emilia cayó en la cuenta de que en su pueblo natal se alquilan numerosas viviendas, por lo que presentó al Ayuntamiento un proyecto de acogida a estos migrantes que se quedan en la calle. Al Consistorio le pareció bien, pero carecía de recursos para sacarlo adelante. Lo más que consiguió Emilia es que le autorizaran la apertura de un hogar.

La radio de la Puebla de Almoradiel, clave para habilitar un hogar a los jóvenes migrantes

De esta manera, Emilia acudió a la radio municipal de la Puebla de Almoradiel para informar sobre este proyecto solidario: “La radio es muy pequeña y solo tiene a una persona, María José, que nos ha ayudado mucho. Cuando expusimos el proyecto al pueblo nos trajeron una pareja una llave para cedernos una casa con ocho plazas”, ha precisado Emilia en 'La Tarde'.

Desde ese momento los vecinos del municipio se implicaron para habilitar la vivienda con su mobiliario y poner el hogar en marcha. Actualmente residen en ella ocho personas. A día de hoy 'Somos acogida' se financia a través de subvenciones o la cuota anual de los socios, de 36 euros.

Gracias a ello, la asociación puede poner en marcha sus talleres en Madrid de los que se benefician cuarenta chicos y mantener el hogar de acogida: “A veinte de estos chicos les hemos documentado, les formamos, aprenden español, por la tarde van a la escuela de adultos, hacen deporte... El objetivo es que se sientan en una familia grande”, ha subrayado.

Así cambió la asociación de Emilia la vida de Abdulai

Abdulai, de 22 años, es uno de los migrantes que fueron acogidos por Emilia. Llegó a España hace tres años procedente de Guinea. Abandonó su país con catorce años: “Pasé por Mali, Argelia, Marruecos y Sahara Occidental, donde cogí la patera para llegar a Canarias”, ha contado en 'La Tarde'.

Tras un año y medio en el centro de menores, se trasladó a Madrid cuando cumplió los 18 años para tratar de hacerse con el permiso de residencia y de trabajo. A su llegada a la capital de España, dormía en la calle sin dinero. Todo cambió cuando conoció a Emilia a través de un amigo.

“Emilia llamó a una voluntaria para que me llevase a un albergue, y luego Emilia me llevó a su casa sin conocerme. Le expliqué mi situación y me llevó a la Puebla de Almoradiel”.

En Guinea, Abdulai dejó atrás a su madre y hermanos: “Hubo conflictos en mi famiia, mi padre tenía tres mujeres porque su religiión se lo permite, maltrataba a mi madre y decidí salir de mi pais”.

Hoy, gracias a la formación de 'Somos acogida'. Abdulai trabaja como soldador en un pueblo cercano a la Puebla de Almodariel, y se está sacando el carnet de conducir. Emilia y su asociación les ha cambiado la vida.