Pilar Cisneros: "No recuerdo haber oído hablar de la sequía en la campaña electoral ni del paro"

Por primera vez en la historia, Cataluña activa la alerta máxima por sequía y pone en emergencia a 22 municipios del Empordà en Girona. Y otros dos municipios en Tarragona. ¿Qué significa? Los vecinos afectados solo podrán consumir 200 litros por habitante y día.

Para que te hagas una idea de lo que eso. En una ducha de 10 minutos gastas 120 litros de agua. Si llegas a los 15 minutos ya has acabado prácticamente con tu cupo diario. Además, también se deberá reducir el riego agrícola al 80%, se elimina por completo el riego urbano. (Pobres jardines todos secos) y los usos industriales se limitan al 25%.

Tan entretenidos estamos con los resultados de las elecciones y ahora con los pactos, las peticiones de unos y otros para llegar a esos pactos que parece que se nos olvida que los problemas reales de la gente, de la gente-gente, siguen estando ahí. Por cierto, no recuerdo haber oído hablar de la sequía en la campaña electoral. Tampoco del paro. Hoy hemos conocido los datos de julio. Se ha reducido en casi 11.000 personas, pero muestra una desaceleración preocupante. Es el peor julio desde 2013.

Tampoco se habló en campaña de los precios de la compra. La bajada del IPC no se refleja en los alimentos.

Leía con interés este fin de semana en el diario El Mundo la entrevista con Víctor Pérez Díaz, doctor en sociología por Harvard y catedrático de la complutense, un análisis muy lúcido sobre la situación política actual. Habla de una política cortoplacista en general y dice una frase que se me quedó grabada:

“En el fondo el país está funcionando sobre la base del sentido común de la gente corriente, que es la que está moviendo la economía con su trabajo bien hecho allí donde le toca”

Y termina: "La maravilla es que España va adelante porque la gente corriente en su día a día hace infinidad de cosas positivas y está reconstruyendo continuamente la vida. Es un milagro".

Milagro o no, la gente corriente, la gente, gente seguimos haciendo lo que nos toca y mientras ¿Los políticos? Ya veremos.