Juan Carlos Cortés: "En poco tiempo, nos quedaremos en la Luna"

El espacio es el lugar donde todos los países quieren estar, la nueva frontera. Un objetivo en el que España no se queda atrás. De hecho, es la cuarta potencia espacial europea y, entre otras cosas, lidera el programa de la Agencia Europea de Vigilancia y Seguimiento Espacial. Al frente de la Agencia Espacial Española se encuentra Juan Carlos Cortés, que ha pasado por el micrófono de 'La Tarde' para explicar la relevancia de la “carrera espacial” en la actualidad.

Dentro de la inmensidad del espacio, es la Luna la que ahora muestra un protagonismo especial. “En poco tiempo, nos quedaremos”, ha asegurado Cortés sobre la posibilidad de que el ser humano se asiente en el satélite de la Tierra. Un objetivo del que ha hablado “con toda certeza” y que es importante para poder llegar a destinos más lejanos. “La Luna está a medio camino de cualquier sitio”, ha señalado.

La Luna que no es el único satélite del que se preocupan en la Agencia Espacial Española. Los creados y lanzados por nosotros también son objeto de estudio. “Hacemos satélites para cumplir necesidades y, en particular, para mejorar la vida del ciudadano”. Y es que, según ha explicado Cortés, cualquier español “utiliza una media de 100 satélites al día”.

Otro de los objetivos más importantes para esta agencia española es poder “comunicar para qué vale el espacio”. Según cuenta su director, “es fundamental despertar vocaciones y tener cantera. En unos años nos jubilaremos y nuestra obligación es dejar esta actividad estratégica en buenas manos y, para ello, es fundamental tener la capacidad de formar gente”.

Un espacio saturado

“Lo preocupante no es que esté saturado, que lo está... Lo preocupante es que la velocidad de saturación va creciendo. Hace seis años, había 5.000 satélites y, ahora mismo, hay 13.500”, ha explicado Cortés. En su opinión, esta problemática se podría corregir de cierta manera con una reglamentación de obligado cumplimiento que hoy no existe.

Otra de las causas del exceso de satélites es la basura espacial. Es decir, satélites que ya no están en funcionamiento pero que siguen en órbita. ¿Por qué no se retiran? Tal y como indica Cortés, "retirar un satélite está en un coste de cientos de miles de euros". Esa reglamentación que considera necesaria obligaría a adquirir el compromiso de que, si se lanza un satélite, "te comprometes a que reentre en un período de tres o cuatro años".