Nuevo desafío para las empresas españolas: Las bajas por paternidad

¿Quién nos iba a decir que iba a llegar el día en que a los hombres les preguntasen en las entrevistas si tienen pensado tener hijos? Sí, a los hombres... porque las mujeres han pasado por ello muchos años. Las bajas por maternidad eran un obstáculo para la contratación... pero fíjate, desde 2021 los hombres disponen por ley de 16 semanas de permiso por paternidad. Las mismas que las mujeres.

Son seis semanas obligatorias, ininterrumpidas y a jornada completa, posteriores al parto y las 10 semanas restantes se disfrutarán en periodos semanales dentro de los 12 meses siguientes al parto. Estas pueden ser seguidas o se pueden alternar. Es un paso adelante para la conciliación familiar, pero también es un rompecabezas para los departamentos de recursos humanos de las empresas. ¿Por qué? Porque según los datos del Ministerio de Seguridad Social, en 2022 se tramitaron más prestaciones por nacimiento para el padre, que para la madre. 246.000 hombres la pidieron frente a 225.000 mujeres.

A esto hay que añadir que normalmente el padre suele dividir la baja por paternidad en varios periodos, con lo que a la empresa se le complica bastante la gestión de la baja y de encontrar un sustituto.

Según algunos estudios, esta equiparación a la hora de pedir la baja por paternidad contribuye a la igualdad de oportunidades laborales para el hombre y la mujer, aunque todavía hay diferencias: En el número de excedencias para cuidar a los hijos, vemos que un 87,4% las solicitaron mujeres y solo el 12,6% fueron hombres. Además, el 90% de las reducciones de jornada las solicitaron mujeres.

El economista Fernando Trías de Bes, ha analizado este nuevo reto al que se enfrentan las empresas de nuestro país: "esto empieza a tener un impacto que se nota en el mundo empresarial y supone un reto sobre todo para las PYMES", explica. "Los contratos temporales para cubrir una baja por maternidad o paternidad están completamente permitidos e incluso tiene una bonificación (...). Pero sin duda esto genera pequeños cambios que van haciendo una modificación de la red de empresas españolas", dice.

Además, Trías de Bes deja claro que en la actualidad hace falta una gran comunicación en las empresas: "en los trabajos nadie es imprescindible, todas las personas son sustituibles, pero este tipo de bajas es verdad que obligan a una comunicación muy transparente entre trabajador y empleador y mucha planificación". Planificación a corto y largo plazo porque las bajas por maternidad y por paternidad tienen una duración de casi cuatro meses.

Y a todo ello, habría que añadir que va a ser necesario seguir modificando las relaciones laborales que ya comenzaron a cambiar a raíz de la pandemia con la flexibilidad y el teletrabajo: "está habiendo un cambio en el mundo laboral tremendo y además, la gente joven que se incorpora al mundo laboral prefiere estos modelos de trabajo híbridos y más flexibles", explica el economista Trías de Bes.

Destaca, por tanto, la mejora en la conciliación laboral de los trabajadores, pero también el rompecabezas que supone este tipo de situaciones a los empleadores.