París, a un paso de hacer un simulacro de supervivencia inédito: un climatólogo analiza el plan francés

El cambio climático está provocando un significativo aumento de las temperaturas. No hace falta más que mirar los termómetros de los últimos días en nuestro país, donde hemos alcanzado cifras récord para la altura de año a la que estamos. No obstante, no es algo que ocurra solo en España, sino que está afectando a todo el mundo, y también lo está haciendo sobre París, la capital de Francia. Se prevé que dentro de 10 o 20 años, la ciudad haya incrementado su temperatura exponencialmente.

De hecho, los técnicos creen que para esa fecha, la temperatura de París podría ser a la de Madrid, pero es que la de Madrid podría ser igual a la de Marrakech. En otras palabras, en 25 años las temperaturas de las grandes ciudades serán aproximadamente las que ahora tienen mil kilómetros más hacia los trópicos. Tanto es así, que en París han anunciado un simulacro ciudadano de supervivencia con una canícula de 50º. Es la temperatura que calculan podrían alcanzar las "islas de calor" en las metrópolis francesas dentro de diez años.

Informe 'París a 50 grados': ¿qué dice esta iniciativa inédita en el mundo?

Esta semana en 'La Tarde' fue uno de los temas que se abordaron a lo lago del espacio de entretenimiento. Según el informe, se calcula que el plan será apto para el año 2025 y prevé ampliar las zonas verdes. Además, también incluye huertos urbanos en las azoteas, aumento de arbustos y árboles en las calles e implantar vegetación en las fachadas, entre otros asuntos. Para conocer más en profundidad en qué consiste esto, hablamos con el profesor de Climatología de la Universidad de Alicante, Jorge Olcina.

"No queremos verlo tan próximo en el tiempo, pero es la tendencia que está teniendo desde que empezó el siglo", comenzó diciendo el experto, quien, además, agregó que todo esto tiene un antes y un después desde la ola de calor del verano 2022. Durante aquellos días, Francia contabilizó más de 11.000 fallecidos solo por el calor. "Desde entonces los veranos han ido ganando grados, en extensión, y no debe extrañarnos que empiecen los preparativos", ha agregado.

A partir de los años 60, las ciudades comenzaron a olvidarse de las manzanas abiertas y comenzamos a "mazacotar nuestras manzanas, cerrar espacios". Es por ello que las ciudades "son las que más está sufriendo esta 'isla de calor urbana'". Un fenómeno que, ha dicho el experto, "preocupa mucho en Europa".

"Tendremos que recuperar y tomar alguna de aquellas tradiciones constructivas que permitan la vida en la ciudad y empezar a trabajar en eso", ha agregado. Para ello, cree que es necesario "más verde" y, además, distribuirlo "de la mejor manera posible", ya ea en calles o plazas, además de aumentar el número de fuentes. También cree que es importante construir pensando en el viento, para que "pueda ser un aliado natural y nos pueda refrescar en determinadas zonas urbanas".

Puedes escuchar el audio completo de la entrevista en la parte superior de esta noticia.