El fármaco que financiará Sanidad para ayudar a dejar de fumar
Madrid - Publicado el - Actualizado
2 min lectura
Es un problema que afecta prácticamente a una cuarta parte de la población en España. Es el tabaco. Provoca cada año una media de 50.000 muertes. No te descubrimos nada si te advertimos de su adicción y todos los problemas que ello conlleva, pero lo que si que es nuevo es lo que está preparando el Gobierno para hacerle frente.
El Ministerio de Sanidad en funciones ya ha confirmado, en boca de María Luisa Carcedo, que van a financiar un medicamento que persigue el objetivo de ayudar a dejar de fumar. Un gesto de este tipo es lo que llevaban pidiendo muchos sectores para combatir los numerosos casos. El fármaco en cuestión es la varenicilina, que se comercializa habitualmente con el nombre de 'Champix'.
Al parecer, este medicamento consigue bloquear los principales efectos placenteros propios de la nicotina. Debería de estar disponible en la cartera de servicios en las próximas semanas, aunque se desconocen plazos exactos. Las fuentes oficiales estiman que, de entrada, se podrán beneficiar unas 70.000 personas.
El precio de este medicamento no es precisamente barato. Las cajas, en función del número de comprimidos te pueden costar entre 116 y 182 euros por lo que la ayuda del Estado se debería de notar.
En Mediodía COPE, para hablar de este fármaco, contamos con el Doctor Luis Seijo Maceiras, que es codirector del Departamento de Neumología de la Clínica Universidad de Navarra” Es un fármaco caro, aunque es verdad que si comparas con el dinero que se gastan los pacientes en fumar te sale a cuenta. Financiar esto era algo de sentido común”, explicaba.
Esta alternativa no es precisamente nada novedoso nos comentaba el doctor: “Lo llevamos utilizando durante varios años. La ventaja es que ofrece el beneficio de dejar de fumar con una tasa de éxito mucho mayor que la de los pacientes que toman placebo”.
La principal virtud es su capacidad para “bloquear el receptor de la nicotina y no recibes la gratificación habitual del tabaco”. Pero no todo es positivo a pesar de la tasa de éxito que tiene tras su aplicación: “Lo que vemos con el fármaco es que aproximadamente un 40% dejan de fumar, aunque la mitad de ellos pueden recaer. Está muy integrado en la sociedad y es fácil volver a caer”, advertía.