Los hosteleros hacen números por si les compensa o no abrir sus negocios

Ya hay fechas concretas para que bares y restaurantes empiecen a abrir sus puertas. Según el plan de desescalada habrá cuatro fases para ellos. Al principio podrán abrir para entregar comidas a domicilio, luego podrán abrir las terrazas con limitaciones de ocupación hasta el 30% y luego se les permitirá que los clientes entren al local, pero con esa misma limitación de un tercio de ocupación.

Este plan ha llevado a que cada hostelero esté pensando desde ayer si le merece o no la pena abrir y si lo hace, qué medidas va a tomar para ajustarse a los planes del Gobierno.

Tienen por ejemplo que ver cómo mantienen la distancia de seguridad entre los clientes, si les van a dar mascarillas y guantes y lo más importante: si les compensa o no abrir en este proceso de desescalada.

Nos situamos en un restaurante concreto para hacernos una idea de cómo será ese momento en el que empecemos a salir a comer fuera. María del Mar Valera es dueña de un restaurante en Alicante, el Caldero y ha contado en Mediodía COPE cómo está preparando su local para abrir. “Tenemos un problema bastante gordo. Yo tengo un local pequeño que tiene 8 mesas entonces, según la separación que tengo que tener, según la estructura de mi local, como máximo podría tener 4 mesas y somos 6 personas en plantilla así que es inviable”, ha resumido María del Mar.

Con respecto a medidas concretas ha señalado: “No apostamos por las mamparas porque pensamos que puede ser un foco más de infección puesto que la gente las manosea entonces o tienes que estar continuamente una persona que esté nada más que limpiando las mamparas o nada”. Ella apuesta por otras opciones. “Nosotros vemos que es más viable la distancia de seguridad entre mesa y mesa y tener medidas higiénicas” ha indicado.