Presidente de Faconauto: "Están demonizando a los vehículos diésel de nueva generación"

A la hora de escoger un coche siempre ha existido la duda de si decantarse por un diésel o por un gasolina. Este último, tras las declaraciones de la ministra sobre su competidor, ha ganado adeptos para convertirse en el dominador del duelo. El diésel, por su parte, se enfrenta a un periodo en el que como asegura el presidente de Faconauto, (patronal que integra las asociaciones de concesionarios oficiales de las marcas automovilísticas, de vehículos industriales y de maquinaria agrícola presentes en el mercado español) Gerardo Pérez, verá reducidas sus ventas porque la afirmación de la ministra "afectará".

Pero no solo influye a los posibles compradores de un vehículo de combustible diésel, sino que ha creado incertidumbre en las personas que ya poseen un coche de estas características: "Se está demonizando a los vehículos de nueva generación porque los vehículos diésel antiguos con más de diez años producen un efecto de carbonización de nuestro medio ambiente importante, pero no deberíamos mezclar esas nuevas tecnologías con las que hoy se producen en las fábricas españolas con esos vehículos antiguos que además son el grueso del problema".

Además, apunta que la solución para llevar a cabo la descarbonización de las ciudades pasa por acabar con el grueso del problema que son los vehículos diésel de más de 10 años. Y eso pasa por la elaboración de un plan, una estrategia conjunta con todos las entidades relacionadas que posibilite poco a poco la transición ordeada a vehículos de energías alternativas, generando así "un debate real".

Faconauto, por lo tanto, ha pedido al Gobierno debate con todos los actores implicados y la aclaración de hasta donde se puede llegar y desde donde se parte porque la transición tardará "20 años". Y recuerda que solo el 25% del problema medio ambiental que tenemos lo genera el automóvil, que el otro 75% lo generan otras actividades que no se contemplan.