Una mirada limpia y libre
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Julián Herranz es una rara avis en el colegio cardenalicio. Siquiatra, canonista y montañero, miembro del Opus Dei y cercano colaborador de san Josemaría Escrivá, Juan Pablo II le nombró en 1991 presidente del Consejo Pontificio para los Textos Legislativos. A sus 93 años, desde la cima, no de una de las montañas que le encanta escalar, sino de su larguísima trayectoria al servicio de cinco papas, nos brinda una historia de la Iglesia reciente con el foco en los pontificados de Benedicto XVI y Francisco. El libro se titula “Dos Papas” y lo ha publicado RIALP. Como prólogo aparece una carta manuscrita de Francisco al recibir el libro en la que leemos: “su gesto me deja mudo… me admira su memoria y su anciana juventud”, y pide al cardenal Herranz que se cuide porque “le necesitamos bien para que siga haciendo sus travesuras eclesiales”.
En las páginas de este libro recuperamos los eventos principales de los últimos decenios de historia de la Iglesia con rigor, con transparencia, con dolor y con amor. Se trasluce el corazón eclesial de Julián Herranz, y eso significa razón crítica, libertad y afecto invencible a este lugar humano (por tanto, frágil), pero donde el Espíritu Santo no deja de alentar. Se respira su amor al Papa, se llame como se llame, la renovación dentro de la continuidad, y un modo de servir en el que fidelidad y libertad no están nunca en contradicción.
Para muchos, que nunca se pondrían frente a un tomo de historia de la Iglesia al uso, este libro puede ser una guía segura, por momentos chispeante, que no elude los conflictos ni disimula las heridas, pero que permite atravesar estos años con una mirada de agradecimiento por tantos hombres y mujeres de Iglesia, por los papas que nos ha regalado y por la fidelidad del Señor a su promesa: “no os dejaré solos”. Por eso este cardenal montañero no se arruga frente a los nudos del presente ni se angustia frente a las incertidumbres del futuro.