Isabel, española a bordo de un tren de Nueva York durante el tiroteo en el metro: "Todo era un caos"

8:30 de la mañana en Nueva York. Plena hora punta, los servicios de emergencia de Nueva York recibían una alerta: “Humo en el metro. Distrito de Brooklyn. Barrio de Sunset Park. Calle 36 con la Cuarta Avenida”.

Cuando llegan los bomberos, lo que se encuentran es una decena de personas tiradas en el suelo, algunas con sangre a su alrededor. La Policía empieza a recabar testimonios de testigos y todos coinciden en lo mismo: un hombre de color negro, vestido con un chaleco naranja, como de obrero, y una máscara anti-gas, había lanzado dos bombas de humo y empezado a disparar en el interior de un vagón.

Es entonces cuando se viven auténticos momentos de incertidumbre. Nadie sabe nada. Casualidades de la vida, Isabel Rebolledo, una española de 41 años que vive en Madrid iba en el tren justo detrás. Se había ido de vacaciones a pasar unos días y se encontró de pleno con esta situación. “De repente el tren se paró en medio del túnel, estaba todo oscuro, y la conductora empezó a indicarnos que se ha producido un incidente. Al poco, cambió el discurso y nos dijo que había habido un incidente policial en el tren que había justo delante”.

24 horas después, la policía ha esclarecido algo más los hechos. De hecho, han dado un nombre: Frank James y lo catalogan como “persona de interés”. Desde entonces, Nueva York está en vilo esperando que la Policía encuentre al causante de este tiroteo. Hasta entonces, muchos tienen miedo de que esto vuelva a ocurrir y que se vivan situaciones como la que vivió Isabel justo después del incidente: "Nos metimos en un ascensor y se metió un hombre, que iba con un chaleco de de constructor. Nos miró y nos dijo que estuviéramos tranquilos, que él no había sido”.

El último balance oficial habla de 29 heridos, 10 de ellos por bala y 5 de ellos en estado crítico. Los 19 restantes fueron atendidos en diferentes hospitales por inhalación de humo. En estos momentos, la Policía busca a un hombre de raza negra, de 1,67 metros, que habría salido huyendo con una máscara de gas y chaleco de construcción de color naranja, y ha anunciado una recompensa de hasta 50.000 dólares para quien proporcione información sobre lo sucedido o sobre el paradero de esta persona.

En el lugar del tiroteo, los servicios de emergencia recuperaron la pistola, otras dos bombas de humo sin detonar y gasolina. Además, en un primer momento, medios locales hablaban de la presencia de explosivos, de bombas sin detonar, pero el Departamento de Policía de Nueva York, durante esta madrugada ha desmentido esa información, no había explosivos.