Mons. Vicente Jiménez: "El proceso sinodal ha sido una experiencia muy gozosa"

Desde hace un par de años, la palabra "Sínodo" suena con cierta frecuencia en los medios de comunicación. Se debe a que estamos inmersos en el proceso sinodal 2021-2023, una consulta que inició el papa Francisco para que todos los católicos del mundo aportasen su opinión sobre cómo debe ser el camino que siga la Iglesia en los próximos años. Un sínodo especial ya que, hasta ahora, el Sínodo era una reunión exclusiva de obispos a los que el Papa convocaba para debatir y que le asesoraran sobre un tema concreto. Sin embargo, en esta ocasión, Francisco quiere que todos los bautizados participemos en este Sínodo que estamos celebrando sobre el concepto mismo de "sinodalidad".

"En la síntesis aparece que el proceso sinodal ha sido una experiencia muy gozosa y positiva", ha dicho en 'Mediodía COPE' el coordinador del Equipo Sinodal de la Conferencia Episcopal Española, Mons. Vicente Jiménez Zamora. "Las conclusiones principales que se han marcado es que la Iglesia debe ser de acogida en nuestras comunidades y parroquias, la corresponsabilidad de todos y también ha estado muy presente el papel de la mujer en la Iglesia y la integración de los jóvenes en la vida pastoral".

Este fin de semana, aquí en nuestro país, se ha presentado la síntesis que la Iglesia en España va a llevar a la asamblea continental que se va a celebrar en Praga del 5 al 12 de febrero. En 'Mediodía COPE' también hemos escuchado al obispo español al que ha elegido el Papa Francisco para coordinar el Sínodo a nivel mundial, monseñor Luis Marín de San Martín, y al secretario del Equipo Sinodal que se ha formado en nuestro país, Luis Manuel Romero.

Un sínodo de tres fases

Este Sínodo está abierto a la participación de todos y se ha dividido en 3 etapas: una diocesana, que concluyó este verano, en la que participaron cerca de 220.000 personas solo en nuestro país; una continental, que se está celebrando desde el mes de septiembre y que, aquí en Europa, concluirá el próximo mes de febrero, en Praga. Por último, una fase universal.