La presión de la élite: Un psicólogo explica cómo tratar de evitar casos como el de Ricky Rubio

Pararlo todo para cuidar de la salud mental. Ha sido el mensaje que ha dado Ricky Rubio, el jugador de baloncesto español que hace carrera en la NBA. Ni siquiera el mundial de basket que está a punto de arrancar, el próximo 25 de agosto, le ha frenado en su decisión.

Hablar de salud mental es algo habitual en el deportista español, sobre todo, en relación con su vida deportiva. Hace unos años ya estuvo a punto de abandonar el baloncesto tras la muerte de su madre. Ahora, ha manifestado que necesita centrarse en su familia y parar.

A pesar de su difícil situación, casos como el de Ricky ayudan a que cada vez más se hable sin tapujos de la salud mental en el deporte profesional. Otra figura reconocida del deporte, Michael Phelps, uno de los mejores nadadores de la historia con 23 oros olímpicos, abandonó su carrera deportiva de forma definitiva. Al igual que Simone Biles, destinada a hacer historia en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, pero debido a la presión se retiró en el último momento, también para proteger su salud mental.

La presión de la élite: las expectativas que los demás tienen en ti, la constante insistencia en mejorar.... Todo eso puede pasar factura, como detalla el psicólogo deportivo Cristian Fernández. “La ansiedad y la depresión suelen estar muy relacionadas, y en este caso tenemos la información de que hay una competición importante. Normalmente ese tipo de competiciones conllevan mucha mayor presión, o factores externos que también influyen”.

Para lidiar con las expectativas que muchos deportistas de cierto nivel puedan tener, este psicólogo aboga por enfocarse en objetivos. “Muchas veces están centrados en resultados, en números o conseguir ganar algún campeonato”, con lo cual, considera que es mejor reconducirlos hacia aspectos más relacionados con su rendimiento. “Qué cosas puedo hacer sobre las que yo tengo control para intentar hacer un buen partido”, pone como ejemplo Cristian Fernández. Centrarse en estos detalles supone cierto alivio para los deportistas, en lugar de estar solo dedicados a ganar y sin saber qué camino tomar para conseguirlo.

En cuanto a si en el mundo del deporte prevalece más la salud mental o la salud física, el psicólogo advierte que debería percibirse como un todo. “Tanto la parte física como la mental deben estar unidas y las dos en buen estado”, afirma. Un deportista que está muy bien físicamente, pero no se encuentra en un buen momento mentalmente, puede que se sienta agotado antes en un partido o competición. “Tienen que ir un poco de la mano”, subraya Fernández.