Así fueron los graves incidentes en San Mamés: La Ertzaintza tuvo que refugiarse en el estadio

El pase del Athletic de Bilbao a la final de la Copa del Rey quedó empañado por los lamentables incidentes que se produjeron antes del partido y en el que fueron agredidos, algunos de gravedad, varios seguidores rojiblancos. Además, la Ertzaintza tuvo que protegerse dentro del estadio ante los ataques de los radicales de Herri Norte.

Y es que lo que en las horas previas al choque parecía una fiesta, acabo convirtiéndose en un infierno con los aledaños de San Mamés convertidos en un campo de batalla. Los ultras bilbaínos, que antes habían atacado un bar en el que se encontraban aficionados colchoneros, comenzaron a lanzar objetos, botellas y bengalas.

En el ataque al bar hubo varios hinchas colchoneros heridos, alguno de ellos de gravedad tal y como confirmó el presidente Enrique Cerezo a las cámaras de Movistar: "Nosotros venimos al fútbol a disfrutar. Y no se pueden consentir agresiones, ni ningún tipo de violación de derechos ciudadanos para ver un partido de fútbol. Les han pillado en un bar y les han agredido allí. Alguno tiene heridas graves y se encuentra en el hospital".

Y eso que la Ertzaintza había desplegado un dispositivo especial para controlar a los radicales e incluso detuvo en las inmediaciones de Bilbao a un autobús repleto de miembros del Frente Atlético. Sin embargo, varios de ellos fueron cercados por los radicales de Herri Norte y tuvieron que encerrarse dentro del estadio para evitar males mayores, mientras los radicales destrozaban las vallas e intentaban acceder a por ellos.

Saldo policial de los disturbios

Un joven de 23 años fue detenido en Bilbao por la Ertzaintza y seis agentes resultaron heridos en las inmediaciones del estadio de San Mamés durante los disturbios que se produjeron antes y después del partido que enfrentó al Athletic Club y al Atlético de Madrid.

Los agentes resultaron heridos con cortes y contusiones debido al lanzamiento de objetos contundentes, botellas y vasos de cristal, así como artefactos pirotécnicos, en los incidentes provocados por grupos de alborotadores durante el acompañamiento a los equipos hasta el estadio y tras la finalización del partido.

Uno de los heridos fue trasladado a un centro sanitario y el resto fueron atendidos en el lugar. Además, varios vehículos policiales resultaron dañados por el lanzamiento de objetos. Según ha informado este viernes la Ertzaintza, el joven fue detenido tras el partido acusado de desórdenes públicos y de atentado contra agentes, y fue puesto en libertad tras las diligencias policiales.

Otro joven, menor de edad, está siendo investigado también por un presunto delito de atentado a agentes de la autoridad. Dentro del estadio, una persona fue denunciada y desalojada por infringir la Ley contra la violencia, el racismo, la xenofobia y la intolerancia en el deporte por realizar gestos que incitaban a la violencia. La Ertzaintza mantiene abiertas las investigaciones para la identificación de otros participantes en los disturbios.