La acertada reflexión de Irene Villa sobre la primera comunión y la fe
La periodista Irene Villa ha hecho una reflexión sobre todo lo que envuelve a la 'primera comunión' que los niños hacen en este mes de mayo
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Irene Villa es periodista, entre otras muchas cosas. Cuando tenía solo doce años, fue víctima de un atentado de la banda terrorista española ETA. Su vida, lejos de ser una historia dramática y triste, es un camino de superación y de inspiración para muchos. El pasado sábado 18 de mayo, escribió en su columna de La Razón, acerca de la primera comunión.
El mes de mayo es la época de celebrar comuniones, e Irene Villa ha hecho una reflexión más que acertada sobre este 'evento' que es -aunque a veces se olvide- un sacramento. En su escrito, asegura que los españoles gastamos centenares de euros en bodas, comuniones y bautizos. Según Irene Villa, los gastos de "una comunión asciende a 8.000 €".
Ante este hecho, la periodista cree que "estas cantidades se pueden llegar a derrochar en un solo día. Si bien es un día inolvidable, no creo que tenga que ser precisamente el gasto económico lo que lo haga más inolvidable".
"El principal gasto es el banquete, pero también la música, la barra libre, las trajes, el fotógrafo, peluquería, maquillaje, flores, ramos, diademas…" Irene asegura que "lejos de ensalzar el gran paso espiritual hacia la fe, cada vez se parece más a una boda. Es triste que recibir el cuerpo y la sangre de Jesucristo pase a un segundo plano porque la celebración eucarística quede eclipsada por la fiesta de después".
"Mis sobrinos, afortunadamente en nuestra familia no se cumplió. Principalmente porque lo que importa de verdad es la fe. Porque ni la fiesta, ni los regalos, ni siquiera ese protagonismo del que gozan los niños en su comunión han de tomar un papel mucho más importante que recibir ese regalo tan potente y vital a lo largo de la vida como es la espiritualidad".
La periodista y esquiadora paralímpica, que se ha hecho famosa por su vitalidad y su fuerza a la hora de afrontar la vida, termina su texto diciendo: "Tras 34 días sin andar y recién llegada de un hospital, puedo asegurarles que la fe es determinante. Y eso es lo que precisamente ayer celebramos".