García Magán, ante el intenso ciclo electoral que se avecina: "La Iglesia no tiene un partido político"
Ante la proximidad de las elecciones autonómicas y municipales, el portavoz de los obispos pide a los partidos que no utilicen a la Iglesia "como un arma arrojadiza"
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El secretario general de la Conferencia Episcopal Española, Francisco César García Magán, ha mostrado su deseo por que los diferentes partidos políticos, ante el ciclo electoral que se avecina en España, “no utilicen a la Iglesia como una moneda de cambio o como un arma arrojadiza en los debates políticos o en la dialéctica que se realiza previa a unas elecciones”.
En la comparecencia del portavoz de los obispos para dar cuenta de los asuntos tratados durante la Asamblea Plenaria celebrada esta semana en la sede episcopal, García Magán ha reiterado que la “Iglesia no tiene un partido político” ni que “ningún partido es el partido de la Iglesia”. “Lo reitero, lo confirmo y lo reafirmo con todas las palabras”, ha aseverado.
El secretario general de la CEE ha aclarado que la Iglesia anuncia su doctrina social que, asegura, “cubre un amplio espectro para el ámbito de la vida, de la justicia social, derecho laboral o las relaciones internacionales...”
Eso sí, Francisco César García Magán ha señalado que en determinadas cuestiones, hay partidos que se acercan más a esa Doctrina Social de la Iglesia, pero ha hecho hincapié en que corresponde a los fieles laicos “hacer un juicio práctico de valoración sobre por quien tiene que depositar su voto”.
En este sentido, el también obispo auxiliar de Toledo ha manifestado que los obispos o curas “no podemos, no debemos indicar porque eso pertenece al juicio práctico de laicos y laicas”, ha insistido en la comparecencia de prensa ante la proximidad de las elecciones municipales y municipales que se celebran en España el 28 de mayo, y las generales a finales de año.
Finalmente, el portavoz del episcopado español ha instado al electorado a “analizar los programas” de cada partido para de esta manera “no dejarse llevar por las propagandas. Un análisis crítico desde la conciencia cristiana para tomar esa decisión”, ha apuntado.