Llega al supermercado y lo que encontró dentro del carrito de la compra hizo que se marchara apresuradamente
Mari Cruz se disponía a hacer la compra como cada sábado en un establecimiento cercano a Córdoba, pero sus planes dieron un giro de 180 grados de manera repentina
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Como cada sábado por la mañana, Mari Cruz se disponía a hacer la compra con sus dos hijos de 9 y 13 años en un supermercado cercano a su vivienda en una localidad cercana de Córdoba. Todo parecía normal aquel día (hace un par de años aproximadamente) hasta que, al llegar al establecimiento, se vio obligada a alterar sus planes de manera repentina.
Fue el momento en el que Mari Cruz se desplazó hacia la zona donde se encuentran los carritos para adquirir uno de ellos y poder depositar los productos. Pero cuando se hizo con uno y dirigió la vista hacia el interior del carrito, se quedó de piedra al comprobar que había una medalla de la Virgen del Rocío.
Pero aquella medalla no era una más, sino que se trataba de la imagen de una de las vírgenes más queridas de España ubicada en la ermita de Almonte (Huelva), y que le había sido arrebatada el día anterior a una prima de Mari Cruz por parte de unos ladrones que le sustrajeron de su bolso.
¿Por qué era importante aquella medalla de la Virgen del Rocío?
Según ha podido saber COPE.es, la medalla tenía un gran valor emocional para la familia, ya que fue adquirida hace más de cuarenta años por los tíos de Mari Cruz (los padres de su prima) durante una visita que realizaron a la ermita. Una visita que no realizaron por razones meramente turísticas. Y es que en semanas anteriores, diagnosticaron una grave enfermedad al tío de Mari Cruz, por lo que acudieron a la iglesia onubense para pedir a la Virgen por su pronta recuperación.
Por desgracia, no se pudo hacer nada por salvar su vida, pero la medalla de la Virgen del Rocío sirvió para mantener unidos a la viuda y su marido ya fallecido. Cuando la tía de Mari Cruz también murió por causas naturales, la imagen la “heredaría” la hija del matrimonio (prima de Mari Cruz), quien siempre la lleva consigo en el bolso para sentir cerca a sus progenitores.
Por ello, el disgusto fue mayúsculo cuando durante la tarde de aquel viernes, mientras se encontraba paseando sola por el río, en un pequeño descuido dos jóvenes que merodeaban por la zona se hicieron con el bolso, suponemos que buscando dinero.
No era perder unos euros o el DNI lo que más dolía a la prima de Mari Cruz, ya que las cantidades eran pequeñas y el carnet de identidad se podía renovar fácilmente. El puñal en su corazón fue perder la medalla que tanto valor sentimental tenía para ella. No había dinero en el mundo para compensar aquella pérdida. Durante la tarde y buena parte de la noche, a Mari Cruz le tocó consolar a su prima, que estaba abatida.
La historia dio un giro de 180 grados en un supermercado de barrio
Pero queda demostrado que los milagros existen, especialmente cuando deseas con mucho ahínco que suceda algo importante para ti. Y algo así ocurrió aquella mañana de sábado cuando Mari Cruz se encontraba en aquel supermercado de barrio cercano al de los domicilios de ella y de su prima. Allí se encontraba la medalla de la Virgen del Rocío, en el interior del carrito de la compra que había elegido Mari Cruz.
Tras comprobar que efectivamente se trataba de la medalla de su prima, y que suponemos abandonarían a su suerte los desaprensivos ladrones en el supermercado horas antes, Mari Cruz fue corriendo a devolvérsela a su familiar, que casi pierde la consciencia de la emoción al recuperar tal vez el objeto más valioso de su vida por lo que representa para ella.