Barriocanal: "La imagen que se está generando de la Iglesia no es la real"

El Vicepresidente para los Asuntos Económicos de la Conferencia Episcopal Española (CEE), Fernando Giménez Barriocanal, ha denunciado este martes que actualmente "se quiere presentar a la Iglesia con un rostro que no es el suyo”. En un almuerzo organizado por el club Siglo XXI, el también presidente de COPE se ha dedicado a derribar las falsedades sobre los supuestos "privilegios" que posee la Iglesia. 

Al comienzo de su intervención, el presidente y consejero delegado del Grupo COPE ha lanzado una pregunta: "¿No vivimos en un Estado laico?¿Por qué tiene que mantener un Estado laico relaciones con la Iglesia?". La respuesta a esta cuestión ha sido una invitación a los asistentes a revisar el el artículo 16 de la Constitución. Este artículo trata sobre la libertad religiosa y Giménez-Barriocanal ha recordado que figura en el título primero y que, por lo tanto, "no es sólo teórico". "Podemos afirmar que la Constitución hace una lectura positiva del hecho religioso. Es la laicidad positiva y no el laicismo militante, que es el que no encuentra acomodo en nuestro marco constitucional", ha señalado.

"Hay 3,5 millones de personas que quieren que sus hijos estudien religión"

La educación concertada es otro de los "mitos" que ha tratado Giménez-Barriocanal en el Club Siglo XXI. La Iglesia y la educación concertada no están directamente relacionados. "El dinero destinado a la educación concertada no es para la Iglesia, es para la educación de nuestros hijos”. Ha añadido los porqués del interés de la Iglesia en esta oferta educativa: “Es un servicio muy demandado y de alta calidad para los padres. Es un sistema más barato para las familias y de referencia en formación en valores”. Ha terminado con este aspecto reflejando su sorpresa por el ataque a esta institución.

En materia educativa, Giménez-Barriocanal también ha hecho mención al profesorado de Religión y a su valor como servicio a la educación y a la demanda de las familias. “Hay 3,5 millones de personas que quieren que sus hijos estudien religión y eso parece que molesta”, ha dicho. “Es una visión con la que se puede no estar de acuerdo, pero es indudable que ha contribuido al progreso de la sociedad".

Giménez-Barriocanal ha tratado en último lugar el "privilegio" que, reconoce, "más le duele". Podría resumirse como una síntesis de las anteriores que provoca que “se quiera presentar a la Iglesia con un rostro que no es el suyo”. "La Iglesia siempre ha estado con los que más lo necesitan: las personas que están solas, con los discapacitados, con los ancianos, con los presos, con las mujeres víctimas de violencia, con los inmigrantes, etc." Comprende y comparte la existencia de “situaciones que generan repugnancia y que no se han tratado bien”. Pero ha insistido en que “ese no es el rostro de la Iglesia”, sino que “el rostro de la Iglesia es el de los sacerdotes, los misioneros, las congregaciones, etc."

"Las instituciones de la Iglesia son milenarias y el registro de la propiedad es de antes de ayer"

En segundo lugar, ha analizado otro de los “mitos” que considera que existe en relación a la Iglesia en España: los “acuerdos” con la Santa Sede. Ha subrayado que la situación de nuestro país no es excepcional ni posee un trato exclusivo o de favor. De hecho, ha recordado que "la Santa Sede tiene acuerdo con más de 180 países, la mayoría de ellos, en un régimen similar al de España”. A lo que se refieren los críticos es al téorico “concordato”. Ha aclarado en este sentido que “no existe ningún concordato en vigor, solo unos acuerdos de 1979, de marcado carácter constitucional, que no ocupan más de cinco páginas del BOE".

El siguiente punto que ha tratado el presidente de COPE es la crítica habitual a la Iglesia en cuestiones fiscales por el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI). Por este impuesto, se acusa a la Iglesia de ahorrarse millones de euros en cada ejercicio. Ha explicado que esta crítica no responde a la realidad, porque no es la única excepción. “La Iglesia goza del mismo régimen fiscal en régimen de IBI, la misma que tiene cualquier fundación de un partido político u ONG". Además, ha apuntado que los acuerdos con la Santa Sede y el tratamiento fiscal no son asuntos relacionados. La clave reside, según Giménez-Barriocanal, en la legislación. Sin embargo, ha apuntado que “podría cambiarse el régimen especial de la Iglesia, pero no debería ser solo el de la Iglesia".

Giménez-Barriocanal ha continuado explicando otro de los "privilegios" de los que goza la Iglesia en términos fiscales. La recaudación o el origen de los ingresos eclesiales la ha desarrollado a partir de la declaración de la renta y de la elección voluntaria de la X. "La Iglesia recibe sólo lo que los más de 8 millones de contribuyentes eligen darle con la equis. El Estado solo proporciona el mecanismo para que esto sea posible", ha afirmado.

Sobre las inmatriculaciones, Giménez-Barriocanal ha recordado que se trata de un mecanismo que ha permitido inscribir bienes de la Iglesia que esta posee desde tiempos inmemoriales. "Las instituciones de la Iglesia son milenarias y el registro de la propiedad es de antes de ayer". Ha concretado en el caso de la catedral-mezquita de Córdoba, recordando que, como bien de la Iglesia, está destinado “a los fieles” en sus “facetas religiosa y cultural”. De hecho, ha apuntado que los costes de mantenimiento de  bienes como estos, la Iglesia los asume como parte de esta labor de ponerlos a disposición de toda la sociedad. 

La falta de transparencia en la Iglesia es un tópico con el que Giménez-Barriocanal no está de acuerdo totalmente porque "se han dado pasos importantes, pero quedan cosas por hacer”. Ha hablado desde su propia experiencia como vicesecretario para asuntos económicos de la CEE: “He sido testigo de cómo la Conferencia Episcopal entregaba documentos con todos sus movimientos de cuentas". Como otras medidas por la transparencia, ha citado la presentación de una Memoria explicativa o la creación de oficinas y portales de transparencia, recordando que “siempre se puede avanzar en transparencia".