Continúa la persecución a la Iglesia en Nicaragua: expulsan a dos hermanas religiosas costarricenses
Asimismo, el gobierno confiscó el monasterio de las hermanas trapenses en San Pedro de Lóvago y lo entregó al Instituto nicaragüense de tecnología agrícola
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Este miércoles, 12 de abril, el régimen nicaragüense expulsó a dos hermanas religiosas: dos costarricenses de la congregación Dominicas de la Anunciata. Isabel y Cecilia Blanco Cubillo colaboraban en un Hogar de ancianos, la Fundación Colegio Susana López Carazo y anteriormente se habían hecho cargo del asilo de Rivas en 1958. Ambas religiosas llegaron a Costa Rica por la tarde de este miércoles.
El pasado martes, 11 de abril, el gobierno confiscó el monasterio de las hermanas trapenses y lo entregó al Instituto nicaragüense de tecnología agrícola, el INTA. Las hermanas trapenses, dejaron el monasterio el 24 de febrero y llegaron a Panamá el día después. Esta congregación pertenece a la Orden de las religiosas Cistercienses de la Estrecha Observancia, habían llegado de Argentina a Nicaragua en el año 2001.
Otros religiosos expulsados
El año pasado, en el mes de julio, las Misioneras de la Caridad fueron expulsadas de Nicaragua luego que la Asamblea Nacional anuló su status jurídico.
Al inicio de la semana Santa fue expulsado el misionero claretiano panameño, padre Donaciano Alarcón, por haber rezado por Rolando Álvarez, obispo de la diócesis de Matagalpa, condenado a más de 26 años de prisión, desde el 9 de febrero, tras haber estado en arresto domiciliar desde el 19 de agosto del 2022.
La Semana Santa en Nicaragua
En el marco de las celebraciones de la Semana Santa, las autoridades nicaragüenses expulsaron del país al sacerdote panameño Donaciano Alarcón.
Alarcón dijo el miércoles pasado desde la ciudad hondureña de San Pedro de Sula, donde se encuentra, que fue expulsado de Nicaragua después de que las autoridades policiales de ese país lo acusaran de predicar a favor del obispo nicaragüense Rolando Álvarez, quien fue condenado a más de 26 años por delitos considerados "traición a la patria".
Además, la Policía Nacional detuvo al menos a 17 nicaragüenses, en su mayoría feligreses que participaron de festividades de Semana Santa y al periodista Víctor Ticay que dio cobertura a una procesión católica, según un informe del Monitoreo Azul y Blanco, cuyos reportes son avalados por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).