El documento final del Sínodo será parte del Magisterio de la Iglesia: "Hechos concretos"

El Papa Francisco ha reafirmado que el Documento Final de la XVI Asamblea General Ordinaria del Sínodo de los Obispos, titulado 'Por una Iglesia sinodal: comunión, participación y misión' y aprobado por él el pasado 26 de octubre, será considerado parte del magisterio ordinario de la Iglesia Católica. En una nota que acompaña al texto, el Pontífice subraya que, aunque “no es estrictamente normativo, su aplicación requerirá de múltiples mediaciones”, y “comprometerá a las Iglesias a tomar decisiones coherentes con los principios y directrices propuestas”.

El Pontífice destaca que este documento, votado y aprobado en su totalidad por la Asamblea sinodal, "representa una forma de ejercicio de la auténtica enseñanza del Obispo de Roma que tiene algunos rasgos de novedad". Esto está en línea con lo que Francisco había señalado en 2015, cuando indicó que la sinodalidad sería "el marco interpretativo adecuado para comprender el ministerio jerárquico de la Iglesia".

"una guía para los próximos pasos"

Francisco insiste en que el proceso sinodal que inició en 2021, durante el que la Iglesia escuchó al Espíritu Santo para discernir pasos hacia una mayor comunión, participación y misión, continúa en las Iglesias locales. El Documento final, subraya, debe ser atesorado por las comunidades eclesiales, como una guía para los próximos pasos.

Asimismo, el Papa recuerda que, para los temas discutidos por los grupos de estudio durante el Sínodo, será necesario más tiempo y reflexión antes de llegar a decisiones definitivas que involucren a toda la Iglesia. Algunas de estas discusiones podrían incluso llevar a “soluciones más adaptadas a las culturas y tradiciones locales”, tal como se ha hecho en el pasado en situaciones similares.

"renovación y evangelización"

El Documento Final también contiene directrices concretas que ya pueden ser implementadas a nivel local y que toman en cuenta los contextos y las realidades de cada región. Francisco señala que, en el futuro, durante las visitas ad limina, cada obispo deberá informar sobre las opciones adoptadas en su diócesis y los desafíos y frutos derivados de ellas.

El Papa concluye su mensaje reiterando la necesidad de que “las palabras compartidas durante el Sínodo sean seguidas por hechos concretos”. La implementación de estas directrices será acompañada por la Secretaría General del Sínodo y los Dicasterios de la Curia Romana. En su oración final, el Papa pide al Espíritu Santo que guíe y sostenga a la Iglesia en su camino sinodal, que continúa siendo un proceso vital de renovación y evangelización.