Estos son los santos a los que te puedes encomendar antes de hacer un examen

''Dejen de pedirme ayuda y pónganse a estudiar''. Así reza un meme que suele compartirse en época de exámenes y que muestra a Jesús cansado de recibir peticiones de ayuda. En estas ocasiones padres y profesores desean suerte y/o que se haga justicia. Lo ideal no sería rezar para que haya suerte, sino para ofrecer el examen, todo el estudio realizado y el resultado, sea aprobado o suspenso ''Ad maiorem Dei gloriam'' (a mayor gloria de Dios).

La cantidad de santos por esta cuestión es amplia. Muchísimos fueron maestros o profesores, como san Juan Pablo II (1920-2005), o tuvieron una vida vinculada a los jóvenes. San Juan Bosco (1815-1888) es el ejemplo más destacado. También están los fundadores de escuelas cristianas, como san José de Calasanz (1557-1648), de las escuelas pías; santa Elizabeth Ann Seton (1774-1821), la primera santa estadounidense o san Juan Bautista de Lasalle (1651-1719).

El estudio como trabajo abre todavía más este amplio equipo de santos. Bajo este punto de vista, hay quien se dirige a san José. El Espíritu Santo no es tampoco ajeno a recibir oraciones cuando se acercan los exámenes, tabmién el ángel de la guarda o las benditas almas del purgatorio.

Sin embargo, el patrón de los estudiantes es santo Tomás de Aquino. Se le atribuye a su puño y letra esta oración:

''¡Ven, Espíritu Santo, Divino Creador, verdadera fuente de luz y fuente de sabiduría! Derrama tu resplandor sobre mi denso intelecto, disipa las tinieblas que me envuelven, la del pecado y la de la ignorancia. Concédeme mente penetrante para comprender, memoria retentiva, método y facilidad para aprender, lucidez para comprender y gracia abundante para expresarme. Guía el comienzo de mi trabajo, dirige su progreso y llévalo a buen fin. Esto te pido por Jesucristo, verdadero Dios y verdadero hombre, que vive y reina contigo y con el Padre, por los siglos de los siglos. Amén''.

El otro gran referente para los estudiantes es san José de Cupertino (1603-1663). Vivió muchas dificultades para estudiar, quizás por una discapacidad, por ello es el patrón de los estudiantes, especialmente en momentos de examenes. Visitar iglesias con una imagen suya es tradición devota. Este es un fragmento de una oración a él dedicado.

''Gloriosísimo San José de Cupertino, benefactor de los estudiantes, protector de los examinandos, no desdeñéis las súplicas que os dirijo implorando vuestro auxilio en los exámenes de mis estudios''.

Estos son los santos más solicitados a la hora de hacer un examen, pero para los más desesperados existen también los santos de las causas imposibles, como santa Rita, santa Filomena o san Judas Tadeo, uno de los doce apóstoles de Cristo.