Estela acompaña la realidad que se vive ante una ruptura matrimonial desde la perspectiva cristiana: "Es una oportunidad de crecimiento"
Tras 14 años de matrimonio, Estela y su marido decidieron divorciarse. Tras años de trabajo y terapia, ella acompaña ahora a personas que estén atravesando una situación similar a la suya
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La realidad del divorcio o la separación matrimonial es algo con lo que vivimos día a día en nuestra sociedad. Solamente durante el año pasado, en 2023, se disolvieron más de 80.000 matrimonios, esto es equivalente a 1,7 por cada 1.000 habitantes.
Una situación que, lógicamente, genera un enorme sufrimiento, no solo de quien lo padece sino también de su propio entorno. Si a esto le sumamos el lado espiritual, la herida que produce esta realidad se convierte en algo todavía más profundo, incluso algo silenciado, lo que complica el camino de sanación de la persona y su entorno.
ante el sufrimiento, estela encontró una "oportunidad de crecimiento"
En 'Ecclesia, en salida' , hemos puesto el foco en el reto que tenemos como sociedad y como Iglesia de acompañar la realidad que se vive ante una ruptura matrimonial. Para hablar de todo esto, hemos tenido oportunidad de contar en plató con Estela, alguien conoce bien lo que significa el acompañamiento eclesial a personas divorciadas.
Nuestra invitada es maestra de educación infantil y madre de una hija que es fruto de su relación con su ex marido.Tras 20 años de relación, y varias sesiones de terapia, fue él quien decidió dar un paso más, dejar la relación y empezar el proceso de divorcio. “Es duro recibir una noticia así y rompe muchas cosas pero también es una oportunidad de crecimiento. Me puse en camino con mucha gente a mi alrededor, con mi familia y mis amigos”, afirmaba Estela.
Tengo una hija a la que tengo que seguir acompañando esté o no casada"
Ante esta situación, la primera persona en la que pensó fue en su hija: “Uno se cae y se levanta con ayuda de mucha gente y tengo una hija a la que tengo que seguir acompañando esté o no casada. El proceso ha sido una cura de humildad, saber que las personas con las que te relacionas no te pertenecen te enseña que es un verdadero regalo que quieran estar contigo”.
Además, gracias a este proceso de divorcio, Estela conoció el proyecto 'Cuatro estaciones', un programa para recrear una nueva vida una vez que alguien lo ha dejado con su pareja, pero desde una perspectiva cristiana. “Llegó a mi vida de una forma providencial, mirando en una web descubrí el libro de '4 estaciones' y decidí leerlo. En él dan mucha importancia al acompañamiento y descubrí que el contenido me iba a ayudar mucho”.
'CUATRO ESTACIONES' un método cristiano para recrear tu vida tras una ruptura de pareja
Ahora, Estela, después de mucho tiempo de trabajo, se dedica a acompañar a personas que estén atravesando situaciones similares a lo que ella experimentó con su separación. “El proceso es muy liberador e incluso sanador. Ahora puedo compartir mi experiencia con otras personas y si lo que yo he pasado puede ayudar al resto, bienvenido sea”.
A pesar de que su matrimonio no continuara adelante, el concepto que Estela tiene sobre el amor no ha cambiado su base pero sí ha evolucionado: “Ahora es más maduro, es algo que me acerca más al Señor y la relación con una persona, mientras dure, hay que cuidarla muchísimo y ojalá sea para toda la vida. Pero en caso de que no sea así,no pasa nada, también está bien”.
Para finalizar, Estela se ha dirigido a todas las personas que pudieran estar sufriendo por el mismo motivo que lo hizo ella. “Detrás de una caída siempre hay una curación. Todo sale bien si uno se deja acompañar y acoge el dolor, el de uno mismo”.