La Fundación 'Bosco Arts' colabora en la construcción de un santuario en Tanzania en honor a los conocidos como 'Mártires blancos'
La directora de la fundación, Lucía González-Barandiarán, ha explicado en 'Ecclesia al día' que el santuario comenzará siendo una capilla y luego un centro de formación para niños y adultos
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La Fundación 'Bosco Arts' contribuirá en la creación de un nuevo santuario en Tanzania. Un espacio que pretende ser además un centro de formación, un punto de encuentro para el aprendizaje y el crecimiento de una comunidad de fe que está en constante expansión.
La directora de la fundación, Lucía González-Barandiarán, ha explicado en 'Ecclesia al día' que 'Bosco Arts' busca promover el arte desde la arquitectura: “El origen es una productora de cine, 'Bosco Films', porque tenemos vocación de transmitir lo que sea bueno relacionado con el arte y los valores cristianos, y de ahí nace la iniciativa, para promover las siete artes, entre ellas la arquitectura, y la educación”.
El santuario será un centro de formación y lugar de acogida de peregrinos
El proyecto de levantar un santuario en Tanzania comenzó hace aproximadamente seis meses, cuando el sacerdote que impulsa la iniciativa se puso en contacto con la fundación y compartió con ellos la idea.
En este sentido, González-Barandiarán ha precisado que todo comenzó cuando a este sacerdote tanzano, que se formó en España con una beca, le cedieron un terreno en una isla cercana al lago Victoria, para construir el santuario: “Es un sitio que está abandonado y es difícil acceder. Hoy se ha ido una arquitecta nuestra para allá, y está previsto que esté construida en menos de dos meses”.
En cualquier caso el proceso será progresivo, ya que en un primer momento el templo será una capilla, para luego ser un centro de formación para niños y adolescentes y culminar en un espacio de acogida de peregrinos.
Los mártires europeos a quienes se dedicará el santuario de tanzania
El santuario se levantará en honor a los conocidos como 'Mártires blancos', un grupo de misioneros europeos posiblemente franceses que a finales del siglo XIX llegaron al lugar para evangelizar, pero fueron ejecutados: “En aquella época había una mezcla con gente que trataba de traficar con esclavos y les mataron por error. Más de cien años después ha habido una devoción que ha crecido y fue el propio pueblo quien puso una cruz para ir a rezar en memoria de estos mártires europeos. Como cada vez iban más gente, fue cuando quisieron levantar la capilla”, ha explicado la presidenta de 'Bosco Arts'.
Y es que como ha comentado Lucía González-Barandiarán, en un contexto de crisis vocacional en Europa, “África y Asia son el futuro de la Iglesia”.
No es el único proyecto arquitectónico en el que colabora 'Bosco Arts' ya que también está inmerso en la construcción de unos comedores para niños en una zona pobre de Lima, en Perú: “Estamos en contacto con otro sacerdote que quiere impulsarlo, y en la empresa tenemos una peruana que les ayudó durante la pandemia en llevar comida”, ha afirmado.