Se inaugura la capilla de san Juan Pablo II en la Almudena: "Queremos hablar de una Iglesia en marcha"

El cardenal Carlos Osoro, arzobispo de Madrid, ha inaugurado este domingo en la Catedral de La Almudena, tras la Santa Misa con motivo de la Jornada Mundial de los Pobres, la nueva capilla dedicada a san Juan Pablo II.

La capilla, diseñada por el estudio de arquitectura Cano y Escario, se ubica junto a la sacristía mayor y es una forma de recordar la estrecha relación del Papa polaco con Madrid, adonde viajó por primera vez hace 40 años, y con la propia catedral, que dedicó en 1993. La capilla es una alusión al primado de Pedro, a la Iglesia y a la santidad.

En ella hay pocos elementos, pero de gran contenido simbólico: 1.115 metros lineales de madera de cedro, que recuerda el compromiso de la Iglesia con la creación y la pasión de Karol Wojtyla por los bosques y las montañas. La nueva capilla, diseñada por Cano y Escario Arquitectura, tiene una estructura formando pórticos con más de 1.000 metros lineales en madera de cedro que transparentan la piedra original de la catedral. En palabras del arquitecto Benjamín Cano, “un espacio nuevo que no oculta lo anterior; queremos hablar de una Iglesia en marcha” y aportan al conjunto un olor de Santidad.

La gran roca en mármol negro Marquina de la que nace un banco en forma de barca como imagen de la continuidad apostólica y de la llamada del Cristo que nos llama, con un cirio pascual en la proaa. El que guía la barca es Cristo resucitado.

Tras la foto oficial del Papa que presidirá la capilla se localiza el confesionario, manteniendo así el carácter penitencial del espacio. Los laterales de la capilla mostraran imágenes del Santo Papa y un código QR permitirá rezar con San Juan Pablo II. Las tres luces suspendidas del techo simbolizan la Santísima Trinidad y el crucifijo, es el que ya se encontraba originariamente en la catedral.

Según se puede ver en la galeria de fotos publicadas por el arzobispado de Madrid, a la capilla se ha trasladado también para su inauguración la reliquia del Santo Padre, una ampolla de su sangre que llego a Madrid tras la celebración de la JMJ de 2011. El relicario lleva grabadas las palabras de Karol Wojtyla como Papa. “¡No tengáis miedo! ¡Abrid de par en par las puertas a Cristo!

Cano y Escario han querido agradecer al Cabildo Catedralicio y a la archidiócesis de Madrid la confianza que ha depositado en su proyecto “que esperamos sirva para acercar la figura del Santo Padre a todos los madrileños y a los millones de visitantes que cada año visitan la catedral”.

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