León implanta "Repara": "Un servicio de escucha y atención a las víctimas ante situaciones de abuso”
El obispo de la diócesis, Luis Ángel de las Heras, explica que "no es solamente una oficina de reclamaciones, sino un proyecto integral para generar la cultura del cuidado"
Repara León ya está en marcha en la diócesis leonesa. "La atención a las víctimas y la prevención de los abusos, con atención a las personas que sufren o han sufrido abusos sexuales, espirituales o de conciencia tanto si han tenido lugar en el seno de la Iglesia católica como en otros ámbitos". Así lo destacó el obispo de León, Luis Ángel de las Heras, que este 29 de mayo ha presentado el proyecto "de acogida, atención y acompañamiento a víctimas y la prevención de cualquier tipo de abuso".
El proyecto leonés surge de la iniciativa ‘Repara’ de la Archidiócesis de Madrid que, en los debates de la Diócesis, fue considerado "el modo más acertado para afrontar esta delicada cuestión a la que estábamos urgidos por la Iglesia, por el Papa, y por nuestra responsabilidad como diócesis, independientemente de que hubiera habido denuncias o no", señaló de las Heras.
El delegado de Misión Samaritana,
, precisó que
"no es solamente una oficina de reclamaciones y no es un órgano de defensa de la institución, es principalmente un proyecto para la prevención e intervención ante los abusos, un proyecto integral para generar la cultura del cuidado frente a los abusos, que no sólo son abusos de carácter sexual, sino que son abusos de autoridad, de conciencia y de poder".
El delegado Francisco José Pérez hizo hincapié en la importancia para que desde la
”, con especial referencia a “
Canal propio de comunicación
Desde el correo electrónico proyectorepara@diocesisdeleon.org se despliega la labor de un equipo interdisciplinar integrado por agentes de escucha activa y orientación, médicos, psicólogos, juristas y filósofos “para poder dar una respuesta desde el punto de vista psicológico, jurídico, canónico y espiritual en un proceso gratuito y confidencial, personalizado” precisó el delegado Francisco José Pérez.
Además, recordó que “en todo este proyecto el interés y el bienestar de la víctima con la prioridad, pero también atendemos a las personas agresoras para favorecer su rehabilitación y la prevención de conductas, porque tenemos la responsabilidad de cuidar, proteger y sanar a las personas que han sido heridas por los miembros de la Iglesia y porque la Iglesia deber ser una comunidad de amor, justicia y misericordia y debemos reflejar el rostro de Jesucristo, no empañarlo”.
