Matrimonio y santidad: las tres propuestas del programa ‘Ecclesia’ para San Valentín

El primer ejemplo de matrimonio modelo cristiano lo encontramos en la Virgen María y San José, los padres de Jesús. Pero son muchos más las historias de santidad que ha dado la Iglesia en cuanto al matrimonio. San Joaquín y Santa Ana, los abuelos de la Virgen María; San Isidro Labrador y Santa María de la Cabeza; San Mario y Santa Marta…la lista de matrimonios que por sus virtudes han llegado a la santidad es larga y el programa ‘Ecclesia’ ha hecho un homenaje a los enamorados recordando tres testimonios.

Los santos Luis Martin y Celia Guérin, padres de Santa Teresa de Lisieux, tienen una bella historia de amor marcada por la confianza en Dios. Ambos fueron canonizados el 18 de octubre de 2015, convirtiéndose en el primer matrimonio declarado santo en la misma fecha. Luis y Celia destacaron por llevar una intensa vida espiritual. Era una pareja humilde. Asistían a Misa diaria, oraban en forma personal y comunitaria, se confesaban con frecuencia y participaban en las actividades parroquiales. Tuvieron nueve hijos y les inculcaron la fe, de la misma forma que la recibieron ellos. Cuando tenía 45 años, Celia se enteró que tenía un tumor en el pecho, por lo que falleció poco después, acompañada por su marido hasta el último momento. Luis y Celia son un matrimonio modelo por su fidelidad y su fe inquebrantable.

La beata Margaret Pole, condesa de Salisbury, fue una noble inglesa en la Inglaterra del S. XVI, durante el reinado de Enrique VII. Margaret fue madre de familia y esposa de Richard Pole, primo del entonces rey que falleció al poco después de casarse con Margaret. La historia de Margaret tiene un trágico final. Fue una mujer que defendió a ultranza el sacramento del matrimonio y su integridad. Tanto fue así, que fue condenada y ejecutada por mostrar su rechazo al divorcio del rey Enrique VII con Catalina de Aragón. Aun siendo condenada y sabiendo el futuro que le esperaba (ser decapitada en público), Margaret siempre se mantuvo firme en su defensa de los dogmas de la religión católica. Por su hazaña la beata es también reconocida como mártir de la Iglesia.

Un matrimonio del S. XXI son Chiara Corbella y Enrico Petrillo. Su historia podría ser la de cualquiera de nosotros. Una pareja normal, sencilla, que se casó muy joven, con gran devoción a San Francisco de Asís, intentando vivir en base a su espiritualidad. Chiara y Enrico se conocieron en el año 2002 en una peregrinación a Medjugorge y se casan unos años después. Chiara se queda embarazada de su primera hija, que venía con una malformación y murió al poco de nacer y lo mismo ocurrió con el segundo hijo de la pareja. Cuando por fin este matrimonio consigue tener un hijo sano, a Chiara le diagnostican un tumor en la lengua que necesitaba de un tratamiento urgente que afectaría al feto. Chiara antepuso su vida y el tener que despedirse de Enrico para tener a Francesco. Cuando el pequeño nació ya era demasiado tarde para Chiara, que falleció poco después de su nacimiento. El de Chiara y Enrico es un matrimonio coraje; Chiara un ejemplo de esposa y madre, declarada Sierva de Dios por la Iglesia. Enrico, un símbolo de fidelidad hasta el final con su mujer. Su ejemplo demuestra que la santidad es un camino posible para todos.

Sus vidas han destacado por sus méritos en el matrimonio. Ejemplos a imitar para cualquier católico. Celia, Luis, Margaret, Chiara y Enrico son solo una pequeña muestra de los matrimonios ejemplares que hemos conocido hasta ahora.