Por primera vez, el rector del santuario de Torreciudad será un sacerdote diocesano nombrado por el obispo de la diócesis de Barbastro-Monzón. Así se ha hecho público este 17 de julio, fecha en la que el obispo Ángel Pérez Pueyo ha anunciado los nombramientos que, tras consultar al presbiterio diocesano, consagrados y laicos, ha aprobado la diócesis de Barbastro-Monzón.
Cambios que responden al objetivo de "consolidar la estructura geográfica y pastoral de nuestra diócesis para una mejor atención y servicio". Tal y como explica el obispado, según el canon 557, corresponde al obispo diocesano el nombramiento del rector y de los sacerdotes dedicados a una iglesia o un santuario, lo mismo que los sacerdotes de los institutos religiosos que sirven a las parroquias.
José Mairal Villellas, rector del Santuario de Torreciudad
De esta forma, Pérez Pueyo ha nombrado al párroco de Bolturina-Ubiergo, José Mairal Villellas, rector del Santuario de Torreciudad para que, junto con los sacerdotes Ángel Lasheras, Pedro J. García de Jalón y de la Fuente y Eduardo Martínez Ruipérez, se responsabilice del cuidado pastoral y ministerial hasta "que se regularice la situación canónica existente entre ambas instituciones".
La formación de estos equipos mixtos, en los que se combina la presencia de sacerdotes diocesanos y de las respectivas instituciones religiosas, "pretende conformar unas estructuras operativas que ayuden a lograr la convergencia y deseada comunión, compartiendo el Proyecto Diocesano Mariano de Evangelización y siempre al servicio de la atención pastoral de todos los fieles de Barbastro-Monzón".
Una terna para el nombramiento
Tras las informaciones aparecidas en distintos medios "y las consultas recibidas a propósito de los nombramientos" el obispado de Barbastro-Monzón ha querido manifestar que "en orden a regularizar su situación canónica con la diócesis, se expuso a la Prelatura la pertinencia de que propusiera a este obispado una terna de sacerdotes para efectuar ese nombramiento de rector (c. 557 &1). Con el paso de los meses, y al no recibir esa terna tras varios requerimientos, se ha optado por el nombramiento del párroco a cuya parroquia pertenece la ermita-santuario de Torreciudad".
¿Qué es Torreciudad?
Torreciudad es un santuario mariano, "un lugar para honrar a la Virgen, que derrocha sus gracias y devuelve la alegría, fruto de una experiencia personal de renovación interior", describen desde la página web del santuario. Bajo esta advocación, la Virgen "muestra su cercanía a las realidades cotidianas de las personas y de las familias, atendiendo con generosidad sus peticiones desde hace más de diez siglos".
San Josemaría Escrivá, fundador del Opus Dei, que nació en Barbastro, cuando tenía 2 años, fue llevado por sus padres a la ermita de Torreciudad para agradecer la curación de una grave enfermedad. En 1975, bajo su impulso, abrió sus puertas el nuevo santuario.
En una carta de junio de 1967 dejó escrito: "Un derroche de gracias espirituales espero, que el Señor querrá hacer a quienes acudan a su Madre Bendita ante esa pequeña imagen, tan venerada desde hace siglos. Por eso, me interesa que haya muchos confesonarios, para que las gentes se purifiquen en el santo sacramento de la penitencia y –renovadas las almas- confirmen o renueven su vida cristiana, aprendan a santificar y a amar el trabajo, llevando a sus hogares la paz y la alegría de Jesucristo: la paz os dejo, la paz os doy".
Situado en un paraje con gran atractivo natural, se conserva una torre de vigilancia de la época árabe que da nombre al conjunto: turris civitatis, torre-de-la-ciudad. Junto a ella se alza sobre unos riscos la ermita, construida sobre los vestigios medievales. La imagen de la Virgen de Torreciudad fue entronizada en 1084 en una ermita junto al río Cinca. "Es una talla románica protagonista de una devoción verdaderamente secular: durante más de nueve siglos, generación tras generación, ha recibido la visita en peregrinación de los vecinos de los alrededores, que le han confiado sus alegrías y penas, han pedido por sus necesidades y le han agradecido favores y gracias".