Omella envía un mensaje de ánimo a todos los enfermos: "Dios les acompaña en estos momentos difíciles"

"Acompañar en el sufrimiento" es el lema que propone el departamento de Pastoral de la Salud, que ha editado los materiales para esta Jornada

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Redacción Religión

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La Iglesia celebra este viernes, 11 de febrero, festividad de Nuestra Señora de Lourdes, la Jornada Mundial del Enfermo. Este día se inicia la Campaña que concluye el 22 de mayo, cuando la Iglesia en España celebra la Pascua del Enfermo. “Acompañar en el sufrimiento” es el lema que propone el departamento de Pastoral de la Salud, que ha editado los materiales para esta Jornada instituida hace 30 años por san Juan Pablo II para sensibilizar sobre la necesidad de asistir a los enfermos y a quienes los cuidan.

El card. Omella ha querido enviar un mensaje de fuerza y ánimo “a todas las personas que están enfermas, así como a sus familias”. El arzobispo de Barcelona le ha pedido “que no olviden nunca que Dios les acompaña en estos momentos difíciles”.

El presidente de la CEE ha recordado además que este viernes se celebra la Virgen de Lourdes, patrona de los enfermos: “Le pedimos que interceda por ellas”.

El video mensaje del Papa Francisco

Francisco ha publicado un mensaje con motivo de la Jornada Mundial del Enfermo y ha subrayado la importancia de sanar las enfermedad tanto “físicas como espirituales”.

“La enfermedad no sólo nos hace sentir frágiles o necesitar a los demás, sino que también impone una pregunta de sentido, que a través de la fe se dirige a Dios, buscando un nuevo significado y una nueva dirección hacia la existencia, que muchas veces no encuentra una respuesta rápida”, dijo el Santo Padre.

Además, Francisco quiso recordar unas palabras de San Juan Pablo II, “quien indicó a partir de su propia experiencia personal el camino de esta búsqueda. No se trata de replegarse sobre sí mismo, sino, por el contrario, de abrirse a un amor mayor”. Francisco advirtió asimismo que “no se debe olvidar nunca la singularidad de cada enfermo, con su dignidad y fragilidad. La persona, en su integridad, necesita cuidados. El cuerpo, la mente, la voluntad, libertad y la vida espiritual”.