‘Si todas las puertas se cierran’, la película que cuenta la lucha de las Oblatas: “Un mensaje muy positivo”

‘Si todas las puertas se cierran’, es el título de la película que se estrena este viernes y en el que se cuenta la lucha de las Oblatas para salvar a las mujeres de la prostitución y de la trata. Cuenta con reconocidos actores como Alexandra Ansidei o Roberto Álvarez. Ambos han pasado por ECCLESIA al día de TRECE para comentar sus sensaciones a escasas horas del estreno de la película.

“Adelantados a su época”

Alexandra Ansidei ha sido la encargada de encarnar a la fundadora de las Oblatas y explica que “para mí fue un honor, interpretar a la madre Antonia.

. Las Oblatas me ayudaron y me dieron mucha documentación para entender esta figura patrimonial de la madre Antonia”.

Por su parte, Roberto Álvarez se pone en la piel del padre Benito Serra, del que afirma que “también era un adelantado a su época. Este hombre consiguió que la Iglesia aceptara esta congregación con la simple voluntad de poder ayudar a las personas que eran víctimas de explotación sexual”.

Álvarez añade que “ya había trabajado con el director, y para mi fue una garantía de que lo que íbamos a hacer iba a tener una gran calidad, como es el caso. La película es una preciosidad, emana una gran ternura y un mensaje muy positivo. Es una exposición al público de una labor que permanece oculta como es la de las Oblatas. Fue muy hermoso encontrarme con estas hermanas y me he sentido muy agradecido con su labor”.

“Están al servicio de los demás sin pedir nada a cambio”

Por último invitan a la gente a ver la película porque “hay que conocer el proyecto de las Oblatas y es algo que me parece muy interesante y que no se conoce mucho, aunque las hermanas estén en 15 países. Es un mensaje de fe de esperanza y creo que lo necesitamos ahora. Es una película muy emocionante. Te sientes muy identificado con la actualidad de estas mujeres y con la actualidad de las Oblatas. Conocerlas es una maravilla y te da un vuelco al corazón porque están al servicio de los demás sin pedir nada cambio. Se acercan al mundo de la prostitución, sin juzgar ni pedir nada a cambio con el simple ánimo de ayudar”.