El ayuntamiento de Valencia exige un tributo a un templo por ocupar la calle una procesión religiosa: 8,5 euros metro cuadrado

El ayuntamiento de Valencia exige un tributo a un templo por ocupar la calle una procesión religiosa: 8,5 euros metro cuadrado

Redacción digital

Madrid - Publicado el - Actualizado

2 min lectura

Por Antonio DIAZ TORTAJADA, Sacerdote-periodista

Según la ordenanza reguladora de actividades, instalaciones y ocupaciones de la vía pública en Valencia: 8,5 euros por metro cuadrado por instalar barracas, espectáculos y actos conmemorativos con cierre de calles, las procesiones religiosas también pagarán sus tasas.

La mayoría de las fiestas tradicionales de la ciudad –que son, principalmente, eclesiásticas, a excepción de las que celebran barrios como el de San Marcelino y Patraix-, están exentas de pago alguno por ocupar la vía pública para celebrar una procesión, tales como las de Semana Santa Marinera y la procesión del Corpus Christi.

Sin embargo, la excepción confirma la regla y el consistorio consideró que la procesión de Santa Catalina que celebra el templo de reparación del mismo nombre –que fue recuperada hace 15 años por el párroco don Francisco Ruiz y consiste en desfilar con la imagen por las calles peatonales cercanas al templo– no contaba con la suficiente tradición, por lo que, cuando el párroco realizó la pertinente solicitud, le exigió el pago de la tasa.

Entonces, don Francisco Ruiz lo tuvo claro: "Yo tengo muchos quehaceres y muchas preocupaciones. Pedí el permiso, entregué mi nombramiento eclesiástico y el seguro de responsabilidad civil, que cuesta 100 euros por una hora y ya lo había pagado. Entonces me dijeron que tenía que entregar otro papel y que abonar una tasa. Y ya no quise saber más. Celebraré la procesión por el interior del templo y ya está. No quiero polemizar con el ayuntamiento. Entiendo que, tal vez en estos tiempos tan difíciles, necesiten dinero".

Es más, el párroco ha solicitado al Ayuntamiento que le devuelva la documentación entregada ya que "el seguro me ha dicho que si les entrego el recibo me devolverán el dinero".

Sin embargo, el Ayuntamiento de Valencia ante esta situación crítica dio marcha atrás a la negativa que, en principio, le dio al párroco de la iglesia de Santa Catalina. "El expediente aún está abierto porque jamás se cobra la tasa a las fiestas tradicionales de la ciudad y puede haber habido un error", aseguraron desde el consistorio.

Y es que, al parecer, la de Santa Catalina no cuenta con la suficiente publicidad. Es más, en el Arzobispado también carecen de documentación gráfica alguna de una fiesta que, este año y si no cambia la decisión del párroco, se celebrará el sábado 24 de noviembre por el interior del templo.

Diversos colectivos de la ciudad negaron ayer cobro de tasa alguna por celebrar las procesiones, aunque apuntaron a que, en ocasiones, "son los propios técnicos los que ponen problemas. Sobre todo en las procesiones del centro de la ciudad".

Eso sí, se apunta ya que ya hay "rumores" en la calle sobre el cobro de la tasa a las procesiones religiosas para años futuros.