Manos Unidas alerta de que la trata de personas no deja de aumentar en plena pandemia

Con motivo del Día Mundial contra la Trata de Personas, Manos Unidas denuncia que la trata de personas no deja de aumentar en plena pandemia. Según el último informe de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC), en 2018, 148 países detectaron alrededor de 50.000 víctimas de trata, aunque el número real de personas afectadas es mucho mayor, dada la naturaleza oculta de este delito.

Manos Unidas expone que en el informe se muestra que los traficantes se aprovechan especialmente de los más vulnerables, como son los migrantes, las personas sin trabajo y los menores de edad. La presencia de menores entre las víctimas de trata se ha triplicado en los últimos 15 años.

Manos Unidas colabora desde hace más de 10 años con la ONG Katilingban Sa Kalambuan Org. Inc. (KKI). Con el objetivo de prevenir y paliar las consecuencias de la trata de personas menores de edad, la ONG KKI puso en marcha en 2008, y ahora se ha construido en un edificio mayor, el Tanglaw Buhay Center, un centro de acogida y reinserción de niñas víctimas de tráfico y violencia sexual que ha logrado reintegrar en la sociedad a más de 350 niñas.

Con el apoyo de Manos Unidas, el Servicio Jesuita a Refugiados (JRS) ha contribuido a que la Defensoría del Pueblo en Colombia generase la alerta temprana 025. En esta alerta se expone que las mujeres son abordadas por la red criminal en las ciudades fronterizas de San Cristóbal, Ureña y San Antonio del Táchira, bajo falsas promesas laborales, y las trasladan engañadas hacia la región del Magdalena Medio con fines de explotación sexual. Muchas de las víctimas no denuncian nunca su situación, debido a que el tráfico de personas es ejecutado por grupos fuertemente armados. Por ello, estas iniciativas prevención y alerta temprana son de suma importancia.