Mons Saiz Meneses preside la 155 peregrinación a Lourdes de la Hospitalidad de Nuestra Señora de Lourdes

Mons Saiz Meneses preside la 155 peregrinación a Lourdes de la Hospitalidad de Nuestra Señora de Lourdes

Redacción digital

Madrid - Publicado el - Actualizado

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Entre los días 19 y 23 de septiembre ha tenido lugar la 155 peregrinación de la Hospitalidad de Nuestra Señora de Lourdes de las diócesis de Barcelona, Terrassa y Sant Feliu de Llobregat al Santuario de Lourdes, en Francia.

Este año la peregrinación ha sido presidida por Mons. Josep Àngel Saiz Meneses, obispo de Terrassa.

En su encuentro con todos los hospitalarios, el primer día, Mons. Saiz Meneses les recordó el mensaje de Lourdes en el marco del Año de la Fe, haciendo especial hincapié en dejarse convertir por Dios. Citando al papa Francisco, invitó a no tener miedo ni de las dificultades ambientales, ni de las flaquezas personales y a comprometerse especialmente con los más necesitados.

El día siguiente, viernes, presidió la Misa en el Altar del Rosario con los peregrinos, invitando especialmente al seguimiento del Señor desde la confianza en Dios. Comentando las lecturas del día reflexionó sobre la necesidad de fundamentar la seguridad en Dios, que es la roca firme, y no en las realidades materiales. Lourdes ayuda a experimentarlo una vez más. El mismo día por la tarde presidió el acto penitencial.

El sábado día 21 de septiembre presidió la Misa en la Gruta de la Virgen en la fiesta litúrgica de San Mateo. Tomando la imagen del cobrador de impuestos convertido apóstol, recordó la necesidad del encuentro con el Señor que cambia la vida humana y le da plenitud. El Santuario de Lourdes, acompañados por la Virgen, es un lugar propicio para tener este encuentro en medio de la vida, entretejida también con momentos de enfermedad y de oscuridad.

Después de la misa saludó todos los enfermos y hospitalarios mientras pasaban por la Gruta. Esa misma tarde presidió la procesión con el Santísimo.

.Finalmente el domingo concelebró la Misa internacional en la Basílica de San Pío X y presidió la comida con toda la peregrinación.