El Papa al Festival de Doctrina Social de la Iglesia: "Arriesgar significa involucrarse"
Madrid - Publicado el - Actualizado
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El Papa al Festival de Doctrina Social de la Iglesia: "Arriesgar significa involucrarse"
El Papa Francisco envía un video mensaje a los participantes del 8° Festival de la Doctrina Social de la Iglesia, que se está celebrando en la ciudad italiana Verona del 22 al 25 de noviembre y les anima a ser "personas libres" sin miedo de ensuciarse las manos.
Mireia Bonilla ? Ciudad del Vaticano, Vatican News, 22 noviembre 2018
"El riesgo de libertad" es el tema elegido para el Festival de la Doctrina Social de la Iglesia de este año; una invitación a reflexionar sobre "lo que siempre ha apoyado el camino de los hombres, las mujeres, la sociedad y las civilizaciones". En su video mensaje, el Papa dice que como cristianos, "estamos llamados a estar atentos y vigilantes" para que este riesgo de libertad "no pierda su significado más elevado y exigente" porque "arriesgar" ? puntualiza – "significa involucrarse" y esta es "nuestra primera llamada".
Francisco también señala que debemos trabajar juntos "para eliminar lo que priva a los hombres y mujeres del tesoro de la libertad" y al mismo tiempo "redescubra el sabor de esa libertad que sabe cómo preservar "la casa común" que Dios nos ha dado". En este sentido, el Papa dice que hay muchas situaciones en las que, incluso hoy en día, "hombres y mujeres no pueden dar un buen uso a su libertad, no pueden arriesgarse", destacando en concreto tres situaciones: la pobreza, el dominio de la tecnología y la reducción del hombre a mero consumidor.
En cuanto al concepto de libertad, el Santo Padre señala que "la libertad nunca mata los sueños, sino que construye en la vida lo que muchos desean pero no tienen el coraje de perseguir". "Ser libre es un desafío ? puntualiza ? pero un desafío permanente: fascina, cautiva, da valor, nos hace soñar, crea esperanza, invierte en el bien, cree en el futuro" y esto significa que contiene una fuerza que es más fuerte que cualquier esclavitud. "El mundo necesita gente libre!" ha exclamado. Además, asegura que la libertad humana se descubre hasta el final "cuando comprende que es generada y sostenida por la libertad amorosa del Padre, revelada en el Hijo ante la Misericordia". Es bajo su mirada compasiva que cada hombre "siempre puede reanudar el camino del "riesgo de la libertad"".
La indigencia
El Papa habla en su video mensaje de la "Cultura del Descarte" y cita una de las frases que se leen en su Exhortación Apostólica Evangelii gaudium: "Ya no se trata simplemente del fenómeno de la explotación y de la opresión, sino de algo nuevo: con la exclusión queda afectada en su misma raíz la pertenencia a la sociedad en la que se vive, pues ya no se está en ella abajo, en la periferia, o sin poder, sino que se está fuera. Los excluidos no son "explotados" sino desechos, "sobrantes"". Para el Papa, si un hombre o una mujer se reducen a "sobras", "no solo experimentan los frutos malvados de la libertad de los demás en ellos, sino que también son defraudados de la posibilidad de "arriesgar" su propia libertad".
El desarrollo tecnológico
El Papa considera que el desarrollo tecnológico es otra de las situaciones que afecta negativamente a la experiencia de la libertad cuando éste "no está acompañado por un desarrollo adecuado de responsabilidad, valores y conciencia" y asegura que "la absolutización de la técnica se puede volver en contra del hombre".
La reducción del hombre a mero consumidor
La tercera situación negativa que explica el Santo Padre está representada por la reducción del hombre a un mero consumidor, "en realidad ? dice el Papa – aquellos que poseen libertad son aquellos que pertenecen a la minoría que detiene el poder económico y financiero". "Esto no es libertad es esclavitud".
Al final del video mensaje, Francisco asegura que a pesar de estas desviaciones, "el deseo de arriesgar la libertad de uno nunca falla", incluso ? dice ? "en aquellos que han vivido y experimentan situaciones de esclavitud y explotación". Por último, expresa su deseo de que seamos "personas libres" sin miedo de ensuciarnos las manos "para hacer el bien y ayudar a los necesitados".