Las señales de que estás pudiendo caer en manos de una secta: "La gente está hecha papilla"

Las sectas son comunidades cerradas que tienen como finalidad la manipulación psicológica y empujar a sus seguidores a realizar actos en contra de su voluntad. De ahí que la asociación RedUne, que lucha contra estos grupos, haya instado al Congreso de los Diputados a incluir la persuasión coercitiva de las sectas en el Código Penal. 

La entidad ha presentado en la Cámara Baja 300.000 firmas para dar solución a las víctimas de sectas que quieren denunciar.

En España, los focos de las sectas se encuentran en su mayoría en Madrid, Barcelona, Levante o la Costa del Sol. Se estima que en nuestro país hay activas unas 250 sectas y un centenar de grupos con comportamientos sectarios.

La forma de captar de estas sectas es simple: lo hacen por redes sociales, con mensajes que ofrecen soluciones fáciles y bonitas para problemas complejos, y por supuesto no informan de su doctrina. Los trasladan a lugares de retiro donde les hacen consumir sustancias psicoactivas sin asesoramiento médico.

Los motivos por lo que los jóvenes caen en las sectas: "Educación y familia"

El fundador de la Red Iberoamericana de Estudio de las Sectas (RIES), Vicente Jara, se ha mostrado sin embargo en 'Ecclesia al día' contrario a que los políticos incluyan en el Código Penal la persuasión coercitiva de las sectas, bajo el argumento de que la gran regulación debe asentarse sobre el ámbito familiar y educativo.

“La familia está siendo triturada, el ámbito educativo está siendo ideologizada a lo bestia. Los ámbitos de siempre donde se puede ver quien engaña y no, son el ámbito familiar y de educación y cuando están siendo triturados, los jóvenes de hoy son fácilmente manipulables, donde no se les enseña a ser críticos con las redes sociales”, ha explicado Jara.

Sin este espíritu crítico, advierte Vicente Jara, no es posible que los jóvenes “sean críticos ante las ideologías que van recibiendo”, y condena la aprobación de leyes como la de Medios o de Memoria Democrática que nos “dice lo que tenemos que pensar sobre cómo fue la historia de hace cincuenta o setenta años”.

"¿no se está ejerciendo una presión psicológica fortísima sobre quienes van a abortar?"

Y es que para el integrante de RIES, los estados democráticos “están siendo totalitarios y las legislaciones acaban usándose para otras cosas”, ha expuesto Jara en TRECE, subrayando a su vez que los ámbitos que hay que proteger son la educación libre y crítica y a la familia”.

Por otro lado, uno de los fundadores de la Red Iberoamericana de Estudio de las Sectas ha denunciado que no se está aplicando esta persuasión coercitiva “sobre personas que no pueden opinar lo que las corrientes ideológicas progres están diciendo”.

“Una persona que va a abortar y se le impide escuchar el latido de su criatura, ¿no se está ejerciendo una presión psicológica fortísima?”, se cuestiona.