El Arzobispo de San Francisco, a favor de procesar a quienes derribaron la estatua de Junípero Serra
Los hechos tuvieron lugar el pasado mes de octubre, cuando cinco activistas cometieron el acto vandálico
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El Arzobispo de San Francisco, Mons. Salvatore Cordileone, se ha mostrado partidario de continuar el proceso judicial contra las cinco activistas que destruyeron el pasado mes de octubre una estatua de Fray Junípero Serra en la propiedad de la Misión San Rafael Arcángel.
“Si un delito grabado en vídeo y presenciado por la policía no es perseguido, se estaría enviando un mensaje profundamente perturbador a los cientos de miles de creyentes en el condado de Marin. Más aún, sentaría un precedente extremadamente preocupante en el sentido de que nadie podría estar seguro de que quienes perpetran crímenes contra ellos serán procesados por sus fechorías”, afirmó el Arzobispo de San Francisco recientemente.
De esta manera, Mons. Cordileone se ha posicionado ante las voces que reclaman a la justicia retirar los cargos de vandalismo contra las autoras de aquellos hechos. La Misión San Rafael Arcángel, aunque no fue fundada directamente por el apóstol de origen mallorquín, si debe su existencia a su legado.
Los actos vandálicos contra las estatuas del franciscano español del siglo XVIII comenzaron el pasado verano, en medio de los actos de odio que tuvieron lugar en EEUU contra las figuras hispanas de épocas pasadas.
El argumento fue, en el caso de Fray Junípero Serra, que se trataba de un racista, cuando realmente representaba justo lo contrario. Y es que el franciscano dedicó buena parte de su existencia a enseñar a los indios, así como de fundar un total de nueve misiones que dieron lugar a muchas ciudades en California.
Quién fue Fray Junípero Serra
Fray Junípero Serra nació a comienzos del siglo XVIII en Mallorca y falleció con algo más de setenta años en Monterrey (California). En el año 1988, el Papa San Juan Pablo II le beatificó, para posteriormente, en 2015, ser canonizado por Francisco en Washington.
Como era propio en la época, los padres de Fray Junípero Serra eran analfabetos, pero él consiguió ingresar en la escuela del convento franciscano de San Bernardino en Petra (Mallorca). A partir de ahí, se formó como filósofo y teólogo.
Trabajo de formación con los nativos en América
Su vida dio un giro de 180 grados en el ecuador de su vida cuando partió de Mallorca hacia Málaga y Cádiz para, desde allí, desplazarse hasta México, conocido entonces como la Nueva España. A punto estuvieron de perder la vida en el viaje. Desde ese momento, emprendieron una tarea muy valiosa por predicar el Evangelio entre los nativos, pero también en enseñarles a leer o escribir o a dominar la práctica de la agricultura y la ganadería.
Tras años en la zona, en 1767 cambió de destino hacia California junto a otros 15 franciscanos para atender a la población indígena y europea, después de que los jesuítas, que hasta entonces realizaban esta labor, fueron expulsados de los territorios que componían el Virreinato de Nueva España.
Fue en aquellos años cuando Fray Junípero Serra fundó las misiones de San Diego de Alcalá, la de San Carlos de Borromeo, la de San Antonio de Padua, la de San Luis Obispo de Tolosa o la de San Gabriel. Esta última se encuentra en lo que hoy es la ciudad de Los Ángeles.