Un grupo de pacientes curados de la covid-19 peregrinan hasta Roma para ver al Papa: "Ha sido muy emocionante"

Durante la primera ola de la pandemia en Italia, los hermanos Mautone - cuatro hermanos que trabajan en centros sanitarios - fueron recibidos por el Papa Francisco en audiencia privada. Allí, los Mautone regalaron una "caja de lagrimas" con las diversas preocupaciones, angustias, sueños y alegrías.

Y es que, en su interior, los enfermeros habían recogido escritos, pensamientos, cartas de quienes se han enfrentado directamente al coronavirus: los que habían estado mal por la covid-19, quienes trabajaban en primera línea, los que habían experimentado la muerte de un familiar: "Yo he leído algunas de estas cartas y muchas serian dignas de ser publicadas", expresaba Raffaele, uno de los miembros de la familia.

Este año han regresado al Vaticano. Sin embargo, no se encontraban solos. Junto a ellos se encontraban los autores de dichas misivas, ya recuperados de la enfermedad.

Tal y como recoge Rome Reports, los sanitarios y sus antiguos pacientes han realizado una peregrinación de cinco días que culminó con la asistencia a la Audiencia General con el Santo Padre. Durante la travesía, se alojaron en conventos, donando pruebas PCR a los hermanos que ocupaban los lugares.

La peregrinación de antiguos pacientes a Roma, una señal de esperanza

Sor Anna, una religiosa que padeció la covid, explicó a la agencia de noticias que esta oportunidad "es el fruto de muchas oraciones. Ha sido muy emocionante estar aquí y ver al Papa". También se expresa en este sentido Luca, otro de los miembros del grupo: "Nos ha dado mucha vida. El año pasado ya renacimos, teníamos una nueva visión de la vida, y hoy esa mirada se ha enriquecido aún más, gracias al Papa".

Andrea, otro antiguo paciente de los hermanos Mautone, pudo darle un regalo al Pontífice: "Un libro sobre su Congregación, la Congregación de la Buena Muerte. El Papa lo ha mirado y le ha dicho: 'Pero si tú no has tenido una buena muerte. Yo te deseo una buena vida'".

Además de expresar su gran alegría por haber podido encontrarse con el Santo Padre, el grupo de pereginos no se muestra conforme con haber realizado la peregrinación. De hecho, su intención es repetirla con más pacientes recuperados el próximo año. También desean ser una fuente de esperanza para quienes aún continúan enfermos y en proceso de recuperación.