Asesinado un sacerdote en Francia a manos del presunto autor del incendio de la catedral de Nantes en 2020

El sospechoso del asesinato, quien acudió a la comisaría de Mortagne-sur-Sèvre para confesar, es supuestamente un hombre de origen ruandés

Asesinado un sacerdote en Francia a manos del presunto autor del incendio en la catedral de Nantes en 2020

Redacción Religión

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Este lunes, 9 de agosto, un párroco ha sido asesinado en la región francesa de la Vendée, en el oeste del país galo, tal y como ha comunicado el ministro del Interior, Gerald Darmanin.

El sospechoso del asesinato, quien acudió a la comisaría de Mortagne-sur-Sèvre para confesar, es supuestamente un hombre ruandés que había provocado un incendio en la catedral de Nantes en julio de 2020. Unos datos que ha proporcionado la presidenta de la Vendée, Christelle Morançais, en Twitter.

El hombre estaba bajo control judicial en el momento del ataque. A esta hora las autoridades investigan las motivaciones del presunto ataque: "Todo mi apoyo a los católicos de nuestro país después del dramático asesinato de un cura en la Vendée. Me desplazo hacia allá", dijo en un escueto mensaje de Twitter el ministro de Interior, que hasta ahora no ha ofrecido más detalles del suceso.

El incendio en la catedral de Nantes en julio de 2020

La mañana del 18 de julio de 2020, los franceses amanecieron con la noticia de que estaba ardiendo la catedral de San Pedro y San Pablo de Nantes. Volvían a revivir las imágenes de un año antes, cuando Notre Dame ardía en llamas.

Los bomberos, al llegar a la zona, encontraron tres focos diferentes, por lo que tuvieron claro desde el principio que el incendio fue provocado. Sin embargo, no se hallaron rastros de entrada por la fuerza en los accesos exteriores de la catedral.

Las primeras imágenes difundidas por la cadena de televisión BFMTV mostraban una gran humareda saliendo de las vidrieras y entre las dos torres de la catedral de Nantes, declarada edificio histórico en 1862.

Horas más tarde, los bomberos controladon el fuego, pero no lograron evitar que las vidrieras explotaran y el fuego devorara el gran órgano del siglo XV. No es el primer incendio que ha sufrido el templo de la ciudad francesa, ya que en 1972 sufrió otro de mayores dimensiones, que hizo que tuviera que permanecer cerrada durante más de una década.