La comentada reflexión de una religiosa sobre las vacaciones de verano: "Lo triste es no cansarte nunca"
La Hermana Olga, perteneciente a la congregación de las Carmelitas Samaritanas, ha hecho una reflexión sobre el periodo estival a través de un vídeo difundido en Youtube
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El mes de julio sigue avanzando, y cada vez son más los españoles que están de vacaciones. Las playas, las montañas o los pueblos de origen (tan poco frecuentados el resto del año, dicho sea de paso), llegan incluso al colapso.
Ha sido un año duro, y toca descansar. Pero ojo, porque descansar no significa “hacer el vago” o estar varias semanas desconectados del mundo, tal y como recuerda en un video difundido a través de Youtube por la Hermana Olga, perteneciente a la congregación de las Carmelitas Samaritanas.
“Estamos de vacaciones y todo el mundo va y viene, yo por ejemplo voy a casa de la congregación. Todo el mundo te dice que es tiempo de descanso y es tiempo de descansar. Me parece fenomenal que descansemos, porque el cuerpo y nuestro espíritu lo necesita”, comenzaba manifestando la religiosa desde el coche que conducía.
A continuación, la Hermana Olga matizaba que el descanso de verdad “está en el Señor y con el Señor. Tenemos que descansar de lo que nos aleja del Señor. Es tiempo para descansar y sanar el corazón de aquello que nos fatiga”.
“¿Las Carmelitas Samaritanas descansamos?”, planteaba de manera retórica la monja: “Claro que descansamos, en el Señor. En esto somos un poco orientales”, manifestaba la Hermana Olga, que asegura que en la congregación aprovechan el verano para hacer “huelga a la japonesa”.
“Cuando un japonés quiere hacer huelga trabaja el doble para arruinar al empresario, porque produce tal cantidad que crea un excedente que el empresario no puede asumir. Pues en verano las Carmelitas tenemos vacaciones la japonesa, o sea trabajando el doble. El descanso no está en no trabajar y en no hacer nada, sino orientarse con todas nuestras fuerzas al Señor”.
Por otro lado, ha explicado que el cansancio no debe ser percibido como algo negativo, sino al contrario: “Yo hay días que estoy muy cansada, pero siempre digo que es bonito cansarnos. Lo triste es no cansarte nunca, porque si nunca te cansas es porque estás economizando esfuerzos y no estás trabajando. Es bonito llegar cada noche cansada”, sostiene.
“Bendito descanso si estás cansado por hacer el bien, estar con los que más lo necesitan. Bendito ese descanso. El problema no es cansarse, sino en qué estoy cansado. Si es porque he estado maquinando para fastidiar al prójimo, pues mal”.
Para concluir, la Hermana Olga ha recordado una anécdota que vivió con un sacerdote. Ella le manifestaba el cansancio que sentía, a lo que el religioso le contestó con la siguiente reflexión: “Un consagrado, un sacerdote y cualquier bautizado no tiene derecho a no estar cansado. Tenemos que cansarnos por y para el Señor, anunciando al Reino. Bendito cansancio. Ojalá yo muera de ese agotamiento que es el amor”, concluía la religiosa de las Carmelitas Samaritanas.