Preocupación entre los católicos de Sudán del Sur tras el ataque a dos parroquias por parte de grupos armados

La Curia de la diócesis Tombura Yambio ha condenado los actos de vandalismo, los robos y los asesinatos del personal de la Iglesia en el país

Preocupación entre los católicos de Sudán del Sur tras el ataque a dos parroquias por parte de grupos armados

Redacción Religión

Publicado el - Actualizado

2 min lectura

La comunidad católica de Sudán del Sur ha vivido con preocupación los dos últimos episodios violentos que se han producido en sendas parroquias del país en los últimos días. El primero de ellos tuvo lugar el 26 de octubre, cuando la parroquia de Mupoi fue vandalizada por un grupo de personas armadas. El segundo tuvo lugar cuatro días más tarde, el 31 de octubrre, cuando la 'Comunidad de Solidaridad', situada en el templo de Riimenze, fue saqueado por varios hombres armados desconocidos.

La Iglesia católica local condenó de manera inmediata estos ataques, que se produjeron en el espacio de apenas una semana. Además de los daños causados a los locales, la diócesis de Tombura Yambio denunció el asesinato accidental del jefe de catequesis, que se encontraba en la parroquia en el momento de los ataques.

En una nota, la Curia de la diócesis condena enérgicamente los actos de vandalismo, los robos y los asesinatos del personal de la Iglesia, no sólo en la diócesis sino también en cualquier parte de Sudán del Sur. El organismo insta a los gobiernos nacional y estatal a salvaguardar el Estado de derecho y a adherirse a los principios nacionales e internacionales de protección de los derechos humanos.

“La Iglesia católica, junto con otras instituciones religiosas y confesionales, trabaja en comunión para mejorar espiritualmente la vida y defender la dignidad humana en medio de la miseria que vive el país", declaran.

La diócesis de Tombura Yambio ha instado al gobierno del Estado a que proporcione seguridad y protección a la Iglesia, sus bienes y su personal. Pide que se garantice la recuperación de todos los bienes robados, tanto en la parroquia de Mupoi como en la 'Comunidad de Solidaridad' de Riimenze y otras propiedades interreligiosas, y que los autores sean detenidos y procesados de acuerdo con la ley.