Suspendidas las procesiones en Mallorca y obligación de ir a misa el domingo

El obispo de Mallorca, Sebastià Taltavull, ha firmado un decreto por el que suspende las procesiones y actos públicos religiosos de Semana Santa en toda la isla y se dispensa a todos los fieles católicos del precepto de ir a misa los domingos y días de fiesta mientras dure la pandemia del coronavirus.

La prohibición por parte del Gobierno de celebrar actos de más de mil personas y la certeza de que el virus seguirá su progresión en las próximas dos semanas, son obstáculos insalvables.

De todos modos, la Iglesia católica mantendrá en Mallorca todas sus celebraciones litúrgicas y sacramentales -misas, matrimonios, funerales, confesiones, etcétera- y seguirá las indicaciones de las autoridades sanitarias de no superar un tercio el aforo y respetar la distancia de seguridad.

Además, el obispo aconseja a las personas mayores y a los que forman parte de los grupos de riesgo que eviten acudir a las iglesias y que sigan la eucaristía por radio, televisión o Internet (IB3 Televisión, Trece, La 2, Cope, Radio María y RNE). Se suprimen las catequesis durante el tiempo en que no haya clase en los centros docentes. De igual manera se suspenden temporalmente las actividades de carácter pastoral como conferencias, reuniones, encuentros o convivencias.

En estos casos, el obispo les anima a rezar una comunión espiritual cuando no puedan recibir materialmente la sagrada forma.

Además, el prelado ha pedido que no haya agua bendita en las pilas de las entradas de los templos, que no se besen ni se toquen las imágenes, que la comunión se reciba en la mano y que el signo de la paz se viva con una inclinación de cabeza.