Se cumplen 14 años de la muerte de San Juan Pablo II: así fueron su vida y pontificado

No eran ni las diez de la noche en El Vaticano. Cientos de personas se encontraban en la Plaza de San Pedro con velas en la mano, en silencio, oración y expectantes. Juan Pablo II estaba a punto de fallecer. Lo hizo a las 21:37 hrs de un día como hoy hace 14 años. El papa de las JMJ, el más viajero de la historia, el que había sobrevivido a los nazis y los soviéticos dejaba vacía la Silla de Pedro. 

Cuatro días después, el 6 de abril, el mundo le decía "hasta pronto". Entre 2 y 5 millones de personas se acercaron a dar el último adiós al pontífice, que reposa en las grutas vaticanas debajo de la basílica. Entre ellos, fieles y autoridades, como los Reyes de España, entonces, Juan Carlos y Sofía. El mundo se alegraría ocho años después, cuando el Papa Francisco lo hizo santo junto a San Juan XXIII. 

Juan Pablo II: Una vida entregada a los demás por encima de los yugos del nazismo y el comunismo

Influencia, sabiduría, superación, cercanía son algunas de las palabras que podrían definirle. Estamos hablando de Juan Pablo II. Una de las personas más influyentes del siglo XX. Su nombre de pila es Karol Wojtyla. Nació el 18 de mayo de 1920 en Wadowice, una pequeña ciudad cerca de Cracovia en Polonia.

Creció en el seno de una familia católica, tanto es así, que su madre quiso dar a luz cerca de un templo para que su hijo oyese así los "cánticos a Dios". Murió cuando el tenía nueve años. Karol tenía dos hermanos más, aunque una falleció antes de que él naciera.

Al morir su madre, se trasladó junto a su padre a Cracovia para estudiar en la Universidad Jagellónica. Eran tiempos de guerra y los alemanes invadieron la facultad, por lo que Karol tuvo que ponerse a trabajar en una cantera y en una fábrica química para poder salir adelante. Durante la ocupación alemana, tuvo que refugiarse en diferentes lugares. Por ejemplo, estuvo escondido en los subterráneos del arzobispado de Cracovia. En esos años Juan Pablo II era un jóven inquieto muy vinculado a la cultura. Era un gran aficionado del teatro y del ajedrez. 

Tras la segunda Guerra Mundial. Bajo la ocupación de la Unión Soviética, continuó sus estudios en el seminario mayor de Cracovia, y en la Facultad de Teología de la Universidad Jagellónica. En 1946 fue ordenado sacerdote.

Poco después, se trasladó a Roma para asistir a los cursos de la Facultad de Filosofía del Pontificio Ateneo Angelicum, donde obtuvo el doctorado en Teología con la tesis El acto de fe en la doctrina de San Juan de la Cruz. Su segundo doctorado fue en el 1953. Se licenció en filosofía por la Universidad Católica de Lublin.

Tiempo después, el Papa Pablo VI lo consagró arzobispo de Cracovia. Y, en 1967 con 47 años fue nombrado cardenal, lo que le convirtió en uno de los más jóvenes de la época. Años más tarde, en 1977 en Roma, coincidió por primera vez con Joseph Ratzinger, entonces cardenal de Múnich. Una figura a la que estuvo muy vinculado durante toda su vida. 

El Papa que creó las Jornadas Mundiales de la Juventud y el más viajero de la historia

Tras la muerte de Juan Pablo I, el 16 de octubre de 1978 fue nombrado Papa. Y el 22 de octubre comenzó su pontificado, por ello,se recuerda la vida de este Papa tan carismático ese día. 

Su cercanía con los más jóvenes le llevó a crear en 1985 las Jornadas Mundiales de la Juventud. Un evento que años después sigue reuniendo a miles de cristianos de todo el mundo. Además, quisó poner también el foco en las familias, inagurando en 1994 los encuentros mundiales de las familias.  

El 13 de mayo de 1981 recibió un disparo en la Plaza San Pedro. Un atentado que casi le cuesta la vida. Juan Pablo II le perdonó publicamente. Un gesto que años después se sigue recordando. 

Ha sido uno de los papas que más viajó por el mundo, estuvo en más de 100 viajes pastorales fuera de Italia. Hablaba más de diez idiomas. Además, de resaltar su cercanía con el pueblo. Tanto es así, que son recordadas sus audiencias generales de los miércoles, en las que la Plaza de San Pedro se llenaba de miles de peregrinos dispuestos a escucharle. Un Papa recordado por ser un soplo de aire fresco en la Iglesia Católica, por su cercanía y su afán por el diálogo. 

San Juan Pablo II falleció a los 84 años el 2 de abril de 2005. Fue a causa de su agravada enfermedad de Parkinson, junto con una serie de problemas cardiorespiratorios.

El Papa Benedicto XVI lo beatificó el 1 de mayo de 2011 y el Papa Francisco lo canonizó el 27 de abril del 2014.