La fama de la santidad en la era digital: "Hay heroísmo cristiano incluso en el mal de las guerras actuales"
Hasta el próximo jueves, miembros del dicasterio, profesores y estudiosos del mundo académico se reúnen en Roma para participar en el Congreso de estudio "La santidad hoy"
Publicado el - Actualizado
5 min lectura
El Instituto Patrístico Agostinianum, a pocos pasos de la Plaza de San Pedro, ha inaugurado este lunes el Congreso de estudio “La santidad hoy”, organizado por el Dicasterio de las Causas de los Santos, que durará hasta el próximo jueves, 6 de octubre.
Los miembros del dicasterio, profesores y estudiosos del mundo académico y exponentes de la cultura y los medios de comunicación están llamados a debatir sobre dos temas principales señalados por el prefecto, el cardenal Marcello Semeraro, en su saludo introductorio. El tema es “La heroicidad cristiana entre la perpetuidad y la actualización”, cómo identificar las virtudes necesarias para una “santidad canonizable”.
El segundo tema es “La fama de la santidad en la era digital”: hay santos y santas también en este 2022, en el bien que germina en "gestos de paz aparentemente inactuales", en la "deserción de la masacre, en la oración, en el testimonio secreto y la caridad que lo cambian todo, aunque sea por una sola persona". Hay santos y santas que, en la guerra de Europa y en otros 168 lugares del mundo, "están hablando también ahora, diciendo a los hombres y mujeres de este tiempo que hay una salvación que nos concierne y que no es una huida hacia atrás, sino una carrera hacia adelante hacia un horizonte cristiano que coincide, aunque no se agote, con el humanismo que hace al mundo en paz".
El tema es, por tanto, de actualidad, tanto más cuanto que la era digital plantea nuevos y urgentes desafíos". Porque, ha comentado el cardenal Semeraro, "no creo que los santos tengan likes en las redes sociales".
Monseñor Bruno Forte, teólogo y arzobispo de la diócesis de Chieti-Vasto, ha sido el encargado de pronunciar el discurso de apertura sobre el tema de "La Santidad como fruto del Espíritu". El arzobispo ha subrayado cómo el Concilio Vaticano II dejó claro que el Espíritu Santo fue enviado "para santificar continuamente a la Iglesia", y que, por tanto, la santificación "es el principal fin y fruto de la acción del Espíritu Consolador en la Iglesia".
Mirando a la actualidad, Forte ha explicado que la Iglesia a la escucha del Espíritu, no "encerrada en un castillo de certezas fáciles", sino "comprometida en el discernimiento de los signos de los tiempos", como indica el Concilio en la Gaudium et spes, "tendrá que vivir en la brecha de la historia, en el diálogo y en la compañía exigente y fecunda con los hombres". De este modo, "se abrirá a reconocer y acoger mansamente la acción del Espíritu que en el hoy de los hombres hace presente el hoy de Dios y abre el camino de la santidad a los que lo quieren con fe".
Ejemplos concretos de los "signos de los tiempos", para el arzobispo de Chieti-Vasto, son "la aspiración a la justicia, a la libertad y a la paz, la presencia universal de testigos fieles del Evangelio y de la radicalidad del amor, llevado hasta el don de la vida en solidaridad con los más débiles y al servicio de la justicia para todos". Entonces, es sobre todo en el ejercicio de la caridad que la comunidad cristiana asume el desafío de los signos de los tiempos, se solidariza con el hombre concreto y le sirve en la causa de su más plena promoción y, por tanto, de la liberación de todo lo que ofende su dignidad de hijo de Dios.
La meta final del pueblo de Dios, es una de las conclusiones de Monseñor Forte, "que hace de los cristianos extranjeros y peregrinos en este mundo, no es un sueño que se aleja de la realidad, sino una fuerza estimulante de compromiso con la justicia, la paz y la salvaguarda de la creación en el mundo actual". Por eso, los santos "animados por la acción del Espíritu, parecen incómodos e inquietantes a los ojos del mundo". Hasta que venga Cristo en su último advenimiento, "la Iglesia sigue siendo el lugar privilegiado de la acción del Espíritu en la historia, y por tanto la Madre que los hijos de Dios necesitan para vivir".
El congreso continúa este martes, 4 de octubre, por la mañana abordando el primer tema, "La heroicidad cristiana entre perennidad y actualización", con las ponencias del padre Rocco Ronzani, profesor del Instituto Patrístico Agostinianium, y de la hermana Mary Melone, que enseña en la Universidad Pontificia Antonianum, sobre la perenne actualidad de los santos.
A continuación, Rosalba Manes, profesora de la Pontificia Universidad Gregoriana, y Angela Ales Bello, profesora de la Universidad Lateranense, hablarán de las Bienaventuranzas como camino de santidad. Por la tarde, el padre Maurizio Faggioni, de la Academia Alfonsiana, hablará sobre el tema "Llamada universal a la santidad y santidad canonizable hoy".
A continuación habrá dos comunicaciones, la de Giuseppe Noia, profesor de la Universidad Católica del Sagrado Corazón, sobre "Cultura de la vida y santidad", y la de Andrea Riccardi, historiador y fundador de la Comunidad de Sant'Egidio, sobre "Cultura del derroche y santidad".
La jornada concluirá con una mesa redonda, moderada por Francesco Giorgino, periodista de la RAI y profesor de comunicación en la Universidad Luiss, con el padre Ronzani, la hermana Melone, el padre Maggioni y Riccardi, mientras que las conclusiones se confiarán al arzobispo Fabio Fabene, secretario del Dicasterio para las Causas de los Santos. El 5 de octubre se dedicará al segundo tema, "la fama de santidad en la era digital", mientras que la audiencia con el Papa Francisco está prevista para la mañana del jueve, 6 de octubre.