"Sport for all": una cumbre en el Vaticano para que el deporte fomente la unión y sea accesible para todos
El Congreso se realizará del 29 al 30 de septiembre en el Aula Nueva del Sínodo en la Santa Sede y, hasta la fecha, participarán casi 250 personas de 40 países de todo el mundo
Publicado el - Actualizado
3 min lectura
En el Vaticano también se habla del deporte y prueba de eso ha sido la presentación este miércoles del Congreso “Sport for All”, que se realizará del 29 al 30 de septiembre en el Aula Nueva del Sínodo en la Santa Sede. Hasta la fecha, casi 250 personas de 40 países de todo el mundo participarán en esta Cumbre.
Este viernes se presentará ante el Santo Padre una Declaración para que el deporte fomente la unión y sea accesible para todos. Padre Alexandre Awi Mello, secretario del Dicasterio para los Laicos, la Familia y la Vida, ha presentado el Congreso subrayando que estamos ante un mundo “que se mueve por intereses personales y la gente hace las cosas solamente si detrás hay un interés económico y material”.
“Uno puede pensar que hablar de deporte es inapropiado o quizás no es el momento adecuado para hacerlo, pero es exactamente el contrario. Con tantas guerras y mucha soledad, el deporte puede ayudar muchísimo. Este tiempo pos-pandemia es una oportunidad idónea para que el deporte sea instrumento de encuentro, formación, misión y santificación”, ha afirmado Padre Alexandre.
Uno de los objetivos de la Cumbre, según el secretario del Dicasterio para los Laicos, la Familia y la Vida, “es instar al mundo del deporte a adoptar la declaración que presentaremos el viernes, que se centrará en poner la persona al centro del deporte, especialmente discapacitados, migrantes, presos, jóvenes y mujeres”.
Esta cumbre intentará reducir las divisiones entre el deporte profesional y el amateur, “para que no se pierda el sentido del juego, de la amistad y de la gratuidad”.
Monseñor Melchor Sánchez de Toca y Alamedo, del
, ha afirmado que inclusión es la palabra clave del congreso: “Antes que todo queremos subrayar que hacer deporte es bueno: así lo confirman las estadísticas y la
ha creado un programa llamado “Deporte y Salud” para promover la actividad física.
”.
“Lo más importante además es que el deporte hay que protegerlo. De la misma manera que protegemos nuestros monumentos, nuestro idioma o nuestras tradiciones, el deporte debe ser protegido por todas las amenazas. Para ser saludable, el deporte requiere entornos seguros”, ha subrayado el prelado español.
Asimismo, precisamente porque hay que proteger el deporte, Monseñor Melchor remarca que este tiene que estar “al alcance de todos”: “
”.
Las tres grandes ideas de la Cumbre serán reflexionar sobre un deporte que sea “cohesionado, accesible y hecho a medida”. Sobre la primera clave, Melchor subraya “eliminar la brecha cada vez mayor entre el deporte de élite y el deporte amateur. El deporte profesional se convierte en un fenómeno cada vez más guiado por la lógica del mercado y menos accesible para todos”.
La segunda idea, accesible: “Se trata de eliminar barreras no arquitectónicas, sino culturales que impiden el acceso al deporte a determinadas categorías de personas. Niñas, ancianos, personas en situación de pobreza y migrantes”. Para la tercera idea, “a medida”, se pide al mundo del deporte “que acceda a esta declaración y que se hagan acciones concretas con un verdadero impacto en el territorio”.
Durante el turno de preguntas, el subsecretario del Consejo Pontificio de la Cultura, el sacerdote español Melchor Sánchez de Toca y Alameda, ha aclarado que si el Vaticano participa en unas Olimpiadas será de manera "simbólica" y no "por las medallas".
Asimismo, el sacerdote ha explicado que la relación del Vaticano con el Comité Olímpico Internacional (COI) es "excelente" pero ha matizado que para participar en las Olimpiadas se necesita crear primero un Comité Olímpico del Vaticano para resolver cuestiones importantes relativas a la ciudadanía y la representación. No obstante, ha dejado claro no es "una decisión unilateral".
"Es el COI el que reconoce un comité nacional como olímpico, no es una decisión unilateral", ha señalado sacerdote español. En todo caso, ha avisado de que si en el futuro el Vaticano participa en las Olimpiadas será con una "función fundamentalmente simbólica". "No se va a competir por las medallas", ha dicho.