Francisco agradece el trabajo y el esfuerzo de los 'vaticanistas': "Sois mis compañeros de viaje"
El Santo Padre les ha pedido seguir construyendo "puentes de conocimiento y de comunicación en lugar de surcos de división y desconfianza"
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Los periodistas de todo el mundo que cubren cada día la agenda del Papa Francisco hoy han invertido los papeles y han sido los “protagonistas”. El Santo Padre ha recibido por primera vez a los miembros del AIGAV, la Asociación Internacional de Periodistas Acreditados en el Vaticano.
“Sois mis compañeros de viaje […] sois una comunidad unida por una misión”, les ha dicho Francisco al principio de su discurso. Un trabajo que llevan a cabo informando a lectores, oyentes y espectadores sobre las actividades de la Santa Sede.
Muchos de los periodistas no solamente siguen al Vaticano, sino también a Italia, al sur de Europa, al Mediterráneo: “Ser periodista es una vocación, un poco como la de un médico, que elige amar a la humanidad tratando sus enfermedades. Lo mismo hace, en cierto modo, el periodista, que elige tocar con las manos las heridas de la sociedad y del mundo. Es una llamada que viene de la juventud y lleva a comprender, a sacar a la luz, a contar”.
Francisco les ha pedido volver a las raíces de esta vocación: "Que la recordéis, que recordéis la llamada que os une en tan importante tarea”. El Papa le has agradecido su trabajo, no solamente “por lo que escribís y transmitís”, sino también por "la perseverancia y paciencia” al seguir día tras día las noticia que llegan del Vaticano.
“Gracias por vuestros sacrificios al seguir al Papa por todo el mundo y al trabajar a menudo incluso los domingos y días festivos. Debo pediros perdón por las veces en que las noticias, que de diversos modos me conciernen, os han alejado de vuestras familias, de jugar con vuestros hijos, del tiempo para con vuestros maridos o esposas”, ha remarcado Francisco. Un “trabajo agotador” según el Papa, un trabajo para “construir puentes de conocimiento y de comunicación en lugar de surcos de división y desconfianza”.
“Os agradezco el esfuerzo que hacéis por mantener esa mirada que sabe ver detrás de las las apariencias, que sabe captar la sustancia, que no quiere ceder a la superficialidad de los estereotipos y de las fórmulas preconfeccionadas de la información-espectáculo, que, en lugar de la difícil búsqueda de la verdad, prefieren la fácil catalogación de hechos e ideas según esquemas preconstituidos. Los animo a seguir por este camino que sabe combinar la información con la reflexión, la palabra con la escucha, el discernimiento con el amor”, ha subrayado Francisco.
Por último, para el Papa la belleza del trabajo del vaticanista “es la de fundarlo sobre la sólida roca de la responsabilidad en la verdad, no sobre las frágiles arenas de la cháchara y las lecturas ideológicas; radica en no ocultar la realidad y también sus miserias, sin edulcorar las tensiones pero sin edulcorar las tensiones, pero al mismo tiempo sin hacer clamor innecesario, sino esforzándose por captar lo esencial, a la luz de la naturaleza de la Iglesia. Cuánto bien hace esto al Pueblo de Dios, a la gente más sencilla, a la Iglesia, a la que aún le queda camino por recorrer para comunicar mejor: con el testimonio, antes incluso más que con palabras”.