Francisco vuelve a pedir que "se silencien las armas" en Tierra Santa: "La guerra borra el futuro"
El Santo Padre ha convocado para el viernes, 27 de octubre, una jornada de oración, ayuno y penitencia por la paz
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El Papa Francisco ha vuelto a mostrar su preocupación, en la Audiencia General de este miércoles, 18 de octubre, por la terrible situación que se está viviendo en Tierra Santa.
“Queridos hermanos y hermanas, mi pensamiento está con Palestina e Israel, las víctimas aumentan y la situación en Gaza es desesperada. Os ruego que hagáis todo lo posible para evitar una catástrofe humanitaria”, ha expresado el Pontífice al final de su catequesis en la plaza de San Pedro del Vaticano.
"La guerra borra el futuro"
Tras el bombardeo en el hospital en Gaza, que ha causado más de 500 víctimas, Francisco ha subrayado que “la posible ampliación del conflicto es inquietante, mientras tantos frentes de guerra están ya abiertos en el mundo”.
El Pontífice ha vuelto a pedir, una vez más, que “se silencien las armas” y que se oiga “el grito de paz de los pobres, de la gente y de los niños”: “Hermanos y hermanas, la guerra no resuelve ningún problema, solo siembra muerte y destrucción. Aumenta el odio, multiplica la venganza. La guerra borra el futuro”.
El viernes, 27 de octubre, jornada de oración, ayuno y penitencia por la paz
Asimismo, Francisco ha pedido a los creyentes apostar por un único camino: el de la paz, “pero no con palabras, sino con la oración y con la entrega total”: “En este sentido, he decidido convocar para el viernes, 27 de octubre, una Jornada de ayuno, oración y penitencia, a la que invito a las hermanas y hermanos de las distintas confesiones cristianas y a los líderes de las otras religiones a que se sumen como consideren oportuno”.
“Esa tarde, a las 18 horas, en San Pedro, viviremos en espíritu de penitencia una hora de oración para implorar la paz en nuestros días, la paz en este mundo. Pido a todas las Iglesias particulares que participen preparando iniciativas similares que impliquen al Pueblo de Dios”, ha subrayado el Pontífice al final de la Audiencia General.