Los datos fundamentales del viaje del Papa a Baréin del 3 a 6 de noviembre
Será el primer Pontífice en visitar Baréin, y la segunda ocasión en la que Francisco viaja al Golfo Pérsico, después de su desplazamiento a los Emiratos Árabes Unidos en 2019
Roma - Publicado el - Actualizado
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El Papa Francisco inicia su 39º viaje apostólico a Baréin, un archipiélago de treinta islas situadas entre Arabia Saudita y Catar. Será el primer Pontífice en visitar Baréin, y la segunda ocasión en la que Francisco viaja al Golfo Pérsico, después de su desplazamiento a los Emiratos Árabes Unidos en 2019, donde se firmó el histórico Documento sobre la Fraternidad.
Francisco pronunciará siete discursos a lo largo de cuatro jornadas, que tienen como punto de partida su participación en un foro de diálogo entre Oriente y Occidente y el deseo de sostener y acompañar a la comunidad católica de la región.
La visita también está dando visibilidad a quienes denuncian las violaciones de los derechos humanos en este rico país del Golfo.
Baréin, el país al que viaja Francisco
Baréin es el país más pequeño de los que forman parte del Golfo Pérsico. La mayor isla de su archipiélago, Bahréin, apenas tiene 55 km de largo y 18 km de ancho. Está conectado con Arabia Saudita por un puente de 26 km de largo.
Se encuentra en el listado de los países más ricos del mundo gracias al petróleo, por encima de Canadá, Reino Unido, Francia y Japón. Según el Fondo Monetario Internacional (FMI) es el quinto país más rico en el mundo árabe y 23º a nivel mundial.
Es miembro de las Naciones Unidas, del Movimiento de Países No Alineados, la Liga Árabe, la Organización de Cooperación Islámica y es miembro fundador del Consejo de Cooperación del Golfo, además, en 2001, el Gobierno estadounidense de George W. Bush designó a Baréin como un aliado importante extra-OTAN.
Hasta finales del siglo XVIII el archipiélago dependía de Persia. Como el resto de los pequeños estados del golfo Pérsico, Baréin fue un protectorado británico hasta que se independizó en 1971. Desde entonces, la Marina de Estados Unidos se hizo cargo de su base naval y en 1995 la convirtió en sede de su V Flota.
Cuenta con una población de 1,4 millones de habitantes, gobernados por el rey Hamad bin Isa Al Jalifa, musulmán sunita. El rey tiene cuatro esposas y 15 hijos. A todos los actos de este viaje le acompañará su tío, que tiene 86 años y ejerce de Primer ministro desde 1970 (un año antes de la independencia), el más longevo del mundo. El heredero es Salmán, el primer hijo del rey Hamad. Tiene cuatro hijos de su matrimonio con la jequesa Hala, fallecida en 2018. No consta que se haya vuelto a casar.
La religión oficial es el islam y en el país rige la sharía, la ley islámica, que es la fuente del derecho.
Los ejes sobre los que girará el viaje
El viaje sigue la misma ruta que comenzó de Azerbaiyán, Turquía, Marruecos, Abu Dhabi, Irak y recientemente Kazajistán. Un acercamiento a las diferentes corrientes de la fe musulmana y una invitación a continuar por el camino del diálogo y el encuentro. El viaje marcará por lo tanto un nuevo paso en las buenas relaciones con el mundo islámico.
Las relaciones diplomáticas entre la Santa Sede y Baréin se iniciaron en el año 2.000 y se incrementaron tras el primer encuentro en el Vaticano entre el Papa Francisco y el Rey Hamad bin Isa al Khalifa en mayo de 2014, quien ha trabajo personalmente en los preparativos del viaje.
En la entrevista previa que el cardenal secretario de Estado, Pietro Parolin, concede a los medios vaticanos, aseguraba que en el contexto actual de guerra la visita del Papa supone un claro mensaje de unidad, cohesión y paz.
La invitación al diálogo y al encuentro entre Oriente y Occidente estará presente tanto en el congreso que clausurará el pontífice como en la reunión con el Consejo de Ancianos musulmanes y en el encuentro ecuménico que se celebrará en la catedral de Nuestra Señora de Arabia. La primera piedra de esta catedral fue un ladrillo de la Puerta Santa de la Basílica de San Pedro donado por el Papa Francisco. Se espera que en alguno de los discursos se reflejen algunos de los conflictos que atraviesa el país, como la situación de la mujer y la falta de libertad de expresión. Las cárceles están llenas de presos políticos, en su gran mayoría de la comunidad chiita.
La comunidad católica que espera al Papa
Con el auge petrolero llegaron a Baréin cientos de miles de católicos de Sri Lanka, India, Bangladés, Líbano, Filipinas y varios países occidentales. Los expatriados constituyen más de la mitad del millón y medio de habitantes de Baréin. Hoy en día la comunidad cristiana representa alrededor del diez por ciento de la población y hay entre 80 y 100 mil católicos que pertenecen a distintas confesiones: ortodoxos griegos, siríacos, católicos latinos y coptos, anglicanos y siro-malabares.
En Navidad y Semana Santa las iglesias de Baréin acogen a muchos cristianos de Arabia Saudita, donde está prohibida cualquier religión que no sea el islam. En Bahréin se construyó la primera iglesia del Golfo, que fue inaugurada en 1939. En el reino hay tres iglesias católicas y una de ellas es la catedral de Nuestra Señora de Arabia, la iglesia más grande del Golfo Pérsico, a la que acudirá el Papa para celebrar un encuentro ecuménico y rezar ante la imagen de Nuestra Señora de Arabia.
En un país donde el islam es la religión del Estado y la Sharía es la fuente principal de derecho, la visita del Papa servirá para agradecer a la comunidad católica su testimonio y fortalecer su fe. El encuentro más numeroso que mantendrá el Papa en Baréin será la Misa en el estadio de Manama, donde se espera la asistencia del máximo de capacidad, 28.000 personas. Muchas de ellas llegarán desde Arabia Saudita.
Contexto político que se encontrará Francisco
Aunque la mayoría de población es chií, Baréin está gobernado por una monarquía suní. Los chiitas (al menos el 60-70% de la población) llevan mucho tiempo pidiendo cambios constitucionales y derechos sociales y económicos.
El viaje estará muy marcado por los llamamientos de los opositores a que el Papa impulse un diálogo nacional y medie para que se pongan en libertad los opositores políticos y los religiosos chiíes encarcelados. Las familias de 12 condenados a muerte han escrito una carta pidiendo al pontífice que medie y se pronuncie contra la pena de muerte.
Baréin ha encarcelado a miles de manifestantes, periodistas y activistas desde el levantamiento contra el gobierno de 2011. Muchos de ellos fueron perseguidos porque participaron en las protestas a favor de la democracia durante la ‘Primavera Árabe’”.
En la víspera del viaje 9 organizaciones no gubernamentales, entre ellas Human Rights Watch han pedido al papa que durante su visita al pequeño país del golfo presione al monarca para que ponga fin a los abusos contra los derechos humanos, se conmuten las penas de muerte y se reitere la prohibición en la Constitución de todas las formas de tortura y malos tratos".
Baréin reintrodujo la pena de muerte en 2017 y desde entonces ha ejecutado a seis personas. Veintiséis se encuentran actualmente en el corredor de la muerte y pueden ser ejecutadas una vez que el rey Hamad ratifique sus sentencias.
Los momentos más importantes de su agenda
El Papa estará en Bahréin del 3 al 6 de noviembre. Visitará las ciudades de Manama y Awali, donde participará en el "Bahrain Forum for Dialogue: East and West for Human Coexistence". Entre los eventos principales, la Santa Misa en el Estadio Nacional de Bahréin y el encuentro con los jóvenes en la Escuela del Sagrado Corazón.
El Papa iniciará el jueves su visita con un discurso en Awali ante las autoridades y el cuerpo diplomático, y el viernes se reunirá con el gran imán de Al Azhar, la máxima autoridad para los sunitas, con sede en Egipto. Esa misma jornada hablará con el "Consejo de Sabios Musulmanes" en la mezquita del Palacio Real y la concluirá presidiendo una oración ecuménica en la Catedral de Nuestra Señora de Arabia, la iglesia católica más grande de ese país, inaugurada en diciembre de 2021 tras siete años de obras.
El sábado celebrará una Misa en el estadio de Manama a la que se espera que asistan unos 28.000 católicos, incluidos unos 20.000 emigrantes extranjeros residentes en el reino y se encontrará con los jóvenes en la escuela del Sagrado Corazón.
El domingo, último día de su visita, el papa se trasladará a la capital Manama para reunirse con obispos, sacerdotes, religiosos y seminaristas.
Cinco viajes
Pese a sus dolores en la rodilla, Francisco, de 85 años, que se desplaza en silla de ruedas desde mayo, ha querido realizar los cinco viajes al extranjero que tenía programados para 2022, incluida su estancia de una semana en julio en Canadá.
Por cierto, que según ha informado la compañía aérea Ita Airways, encargada de trasladar al pontífice hasta Baréin, el vuelo -de 3.879,30 kilómetros, con una duración de cerca de 5 horas y media- será completamente sostenible utilizando un carburante alternativo que contribuye a la descarbonización. También se reducirán las emisiones de CO2.